Mueren policías buenos y malos

En los últimos días han asesinado a dos policías cancuneneses. Con estos ya son cuatro los agentes muertos...

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En los últimos días han asesinado a dos policías cancuneneses. Con estos ya son cuatro los agentes muertos y es el sexto ataque contra oficiales de la corporación. Cunden las especulaciones. Las razones sobran.

El primero -de los últimos dos- cayó el pasado 8 de julio, en cumplimiento de su deber, al recibir varios disparos desde un vehículo rojo sobre el Arco Vial, en la supermanzana 260. Fue identificado como Rubén Lara Sánchez, a quien rindieron homenaje sus compañeros, superiores y autoridades.

El otro, un agente de Tránsito identificado como Valentín Fernández Castillo, murió antes del anochecer del sábado, cuando sujetos a bordo de un auto blanco le dispararon entre la Andrés Quintana Roo y la Chichén Itzá, en la región 97.

Por todo ello, además se multiplican las preguntas; sobre todo las relacionadas con su situación profesional, porque se sabe que no solo en Cancún están en la mira de los delincuentes, sino que es una lamentable realidad del país. El Instituto Nacional de Estadística y Geografía difundió datos reveladores el recién pasado martes 11.

De entrada, presentó el universo nacional actualizado al primer semestre: están activos poco más de 331 mil oficiales y agentes de tránsito, de los cuales, 82% son hombres y el resto mujeres. Eso significa que son 231 por cada 100 mil habitantes, una cifra menor a los 247 registrados en el 2010.

Aquí los problemas: según el documento “Estadísticas a propósito de los policías y agentes de tránsito”, laboran 65.4 horas semanales en promedio; solo 0.2% declara trabajar entre 15 y 34 horas semanales; 29.4% lo hace entre 35 y 48 horas, y 70.4%, más de 48 horas.

Respecto al salario, el promedio es de 31.3 pesos por hora laborada, cantidad que llega a 66.4 pesos en Baja California; 15.4 en Chiapas; 19.5 en Veracruz, y 19.9 en Yucatán. En la mayoría de los estados prevalece la carencia de prestaciones, el armamento en mal estado y un equipo insuficiente.

En Cancún, ha divulgado el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, son de los mejores pagados, y el anuncio reciente de mejores condiciones, ofrece un ambiente esperanzador. Una buena en tiempo de crisis.

Al conocerse experiencias como las detalladas, el ciudadano debe reconocer que hay policías valientes y buenos, aun cuando prevalezcan en la memoria colectiva las de quienes se coluden con criminales o son corruptos. Porque en todo caso, dicho ejercicio no implica de ninguna manera cerrar los ojos frente a las dificultades generalizadas, las cuales deben ser resueltas.

Es necesario que diferencie la dualidad “buenos y malos” para no condenar motivados por el contexto de violencia. Al respecto, la última encuesta de Grupo de Economistas y Asociados e Indagaciones y Soluciones Avanzadas (GEA/ISA) entrega opiniones sorprendentes, como que “uno de los principales problemas en México es no combatir a delincuentes”.

Claramente este último supuesto no tiene asidero con muertos de por medio.

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