Video: Luis Soto

Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Alejandra lleva cuatro meses tratando de descifrar lo que le ocurrió en la guardería en la que dejó a su hija Julia, pues lo único que supo es que se había atragantado con un plátano, sin que las maestras pudieran reanimarla.

Desde aquella mañana su vida cambió, una parte de ella se fue, en ocasiones dice imaginar que esto es un terrible sueño del que va a despertar y entonces la verá dar sus primeros pasos, brincar de alegría ante la llegada de su padre, y sobre todo le escuchará balbucear su primera palabra: mamá.

También te puede interesar: Necropsia: Niña de guardería murió por golpe en la cabeza

Sin embargo la frustración y el enojo la regresan a la realidad, su realidad, Julia cerró sus ojos, los médicos 17 minutos después de recibirla le diagnosticaron muerte cerebral, pero ella se aferró a este mundo 14 días más hasta que la muerte llegó desúés de vivir un año cinco meses, dejó de latir su corazón.

Sin saber que sería la última vez que la tendría entre sus brazos, como de costumbre la despertó y jugó un rato con ella, la vistió y le dio su leche antes de irse a trabajar, Alejandra revive la siguiente escena con mucho dolor, pues verla entubada y que respiraba con ayuda de un ventilador la hizo estremecer, “mi hija no lo merecía, ella estaba sana, no estaba enferma…”. 

“En la guardería, todo sigue igual”

Alejandra, le llora al fruto de su amor, a su más grande sueño que era el convertirse en madre, también le llora a la desesperanza y a la frustración porque asegura que el caso de su bebé sigue impune, sin que las autoridades ministeriales aceleren la investigación.

“Hasta ahora no han hecho nada, sigue pendiente revisar el expediente clínico durante la estancia de mi hija en el hospital, tampoco se ha hecho algo en la guardería, todo sigue igual, pero no descansaré hasta que todo se aclare”, dijo.

A ellos los mantiene avante el amor por su hija y el deseo de justicia, “…no quitaremos el dedo del renglón, queremos que se nos diga qué pasó y que pague quien sea responsable, porque a nosotros nos mintieron…”