Alianza opositora se rompe

Decisiones de último momento, giros inesperados y alianzas que se forman o se rompen son moneda corriente...

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Decisiones de último momento, giros inesperados y alianzas que se forman o se rompen son moneda corriente en el ámbito político electoral, y en Quintana Roo, vaya que también se cuecen habas.

Así lo vivió en carne propia el Partido de la Revolución Democrática (PRD) que, en un hecho inédito en las últimas contiendas electorales, en este proceso electoral 2024 irá en solitario.

La prudencia y la cautela son aliadas esenciales en este terreno, ya que las intenciones declaradas pueden no traducirse en acciones concretas, y aunque a nivel nacional la alianza opositora PRI-PAN y PRD se mantiene firme, en el ámbito local este pacto no cuajó.

Las razones detrás de esta decisión revelan desacuerdos y pugnas internas, especialmente en el reparto de candidaturas, y pudieran evidenciar el “agandalle” de los partidos azul y tricolor.

Y es que en la reciente presentación de solicitudes de registro de coaliciones para el proceso electoral local 2024, las tensiones políticas y las decisiones estratégicas marcaron el inicio de una etapa crucial para la vida política de Quintana Roo.

Los partidos Morena, PVEM, PT y MAS fueron los primeros en formalizar su intención de coalición, delineando alianzas que prometen una contienda electoral vibrante.

Sin embargo, la sorpresa de la noche llegó cuando el PRD, a última hora y en solitario, decidió no participar en la coalición denominada "Fuerza y Corazón por Quintana Roo", propuesta por PAN y PRI.

El PAN encabezará postulaciones en municipios clave como Othón P. Blanco, Solidaridad, Lázaro Cárdenas, Isla Mujeres y Tulum, mientras que el PRI liderará en Bacalar, Puerto Morelos, Benito Juárez, Cozumel, José María Morelos y Felipe Carrillo Puerto.

El PRD, confiado en su capacidad y en el respaldo ciudadano, ha optado por ir solo en esta contienda. Aunque esta decisión puede ofrecer autonomía, también implica asumir riesgos considerables.

La ausencia de alianzas estratégicas podría poner en peligro su registro a nivel estatal si no logra alcanzar el umbral mínimo de votación; lo mismo para el partido Movimiento Ciudadano.

Estamos ante un juego político que refleja tensiones, negociaciones y apuestas significativas.

La ciudadanía observa con atención, y las decisiones tomadas en esta etapa inicial del proceso electoral pueden tener repercusiones importantes en la configuración política del estado.

Quintana Roo se encamina hacia un proceso electoral lleno de desafíos y expectativas.

Los partidos han trazado sus estrategias, pero el desenlace final dependerá del veredicto de la ciudadanía, que con su participación activa definirá el rumbo político de nuestra entidad.

¿Marcará este proceso electoral el fin del PRD y MC en el estado?

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