Claudia Olavarría/SIPSE

CANCÚN, Q. Roo.- Los desarrolladores deberán equipar los nuevos fraccionamientos con bancas, botes de basura, árboles y áreas de esparcimiento, además que estarán obligados a presentar un plan de reforestación urbana con plantas de la región, de acuerdo con la iniciativa presentada por la Comisión de Desarrollo Urbano y Asuntos Metropolitanos ante la XIII Legislatura de Quintana Roo, el pasado 18 de noviembre.

 

De acuerdo con la Ley de Fraccionamientos en el estado, el fraccionador tiene la obligación de ceder a título de donación al municipio donde construirá, una superficie de terreno para equipamiento en donde se construirán parques, escuelas, mercados, puestos de policía, entre otros servicios municipales en beneficio de la comunidad.

 

Ahora, con dicha iniciativa el desarrollador de vivienda urbana, además de donar un 15% de la superficie neta de los mismos, tendrán la obligación de equipar sus proyectos inmobiliarios.  

 

El diputado Juan Carlos Pereyra Escudero, presidente de la comisión antes mencionada y responsable de la presentación de la iniciativa de reforma, durante la presentación recalcó que no buscan perjudicar a los inversionistas, sino crear un marco normativo adecuado a la realidad para el crecimiento urbano sano, ordenado y equilibrado con el medio ambiente para nuevas zonas habitacionales sustentables y armónicas. 

 

En la presentación dijo que hay fraccionamientos en todo el territorio quintanarroense que no cuentan con espacios óptimos para una sana convivencia, y por ello se busca que antes de iniciar la venta de casas, éstas ya cuenten con áreas de recreación listas para utilizarse y que contemplen el desplazamiento de personas con alguna discapacidad. 

 

En un recorrido por los fraccionamientos ubicados en la colindancia del Arco Norte con López Portillo, uno de los fraccionamientos de casas duplex cuenta con un camellón central en la avenida principal con bancas y ciclopista, pero todo pavimentado, con algunos árboles a lo largo del mismo. 

 

La semana pasada, en sesión de Cabildo el municipio de Benito Juárez aceptó la donación de cuatro mil 50.75 metros cuadrados de una superficie total de 40 mil metros cuadrados que ocupa el fraccionamiento de la supermanzana 2012 (El Roble). 

 

La donación constó de tres predios en las manzanas 31, 38 y 41, los cuales ya se incorporaron al patrimonio municipal y que deberán ser usados para beneficio de la comunidad. La licencia de construcción del fraccionamiento es de octubre del 2007 y es cinco años después que se da la donación, cuando la mayoría de las casas tipo duplex están habitadas.

 

(Edición: Florencio Sabido)