Julián Miranda/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- Los policías y caballos que conforma la policía montada de Cozumel carecen de equipo e instalaciones adecuadas para desempeñar sus funciones.

Entre las carencias más evidentes se encuentran la falta de una caseta policíaca con servicio sanitario en la zona ejidal “Las Fincas” y tres de las siete sillas para montar están en mal estado.

La palapa que sirve de centro de operaciones no tiene muros y los policías deben de hacer sus necesidades fisiológicas en las áreas verdes. Cuando llueve tienen que solicitar apoyo a viviendas cercanas para evitar mojarse.

El agrupamiento fue creado a mediados del 2009, junto con la desaparecida Policía Turística y su objetivo es fortalecer la seguridad de las zonas ejidales, rancherías y acceder a áreas selváticas, explicó el subdirector de la Policía Montada, Juan José Cepeda Argaez.

Los ocho caballos fueron adquiridos por el Gobierno de Quintana Roo y entregados en comodato. Los caballos tenían un promedio de tres años de edad y los policías municipales fueron capacitados para su manejo.

Para resguardar los equinos se habilitó una caballeriza en el kilometro 4.5 de la carretera costera sur, en un predio prestado por un particular.

Hace tres años se instaló una improvisada base operaciones en un lote prestado en la colonia Las Fincas, para evitar que se generen problemas entre los colonos del asentamiento irregular.

Para resguardar a los elementos comisionados a este lugar se instaló una palapa hecha con techo de cartón y con paredes forradas con bolsas de plástico o lona. El lugar carece de un baño para que los policías realicen sus necesidades fisiológicas.

Uno de los elementos dijo, en forma de broma, que “no requieren baños porque tienen mucho monte para hacerlo” (sic).

La “caseta” no protege a los elementos de las inclemencias climatológicas y cuando llueve deben de protegerse en viviendas cercanas. El problema se agrava cuando existe la presencia de moscos por la falta de paredes.

En el exterior de la caseta está estacionado un remolque para el traslado de los animales, el cual tiene una llanta en mal estado, por lo que no pueden emplearlo para transportar a los equinos desde la base de operaciones.

Si tuvieran en buen estado el vehículo, en caso de conflicto podrían acudir de manera inmediata, reconoció personal del agrupamiento.

Otros de los conflictos que enfrenta el agrupamiento montado es que tres de las siete sillas para montar están en mal estado por su uso y requieren ser cambiadas.

Cepeda Argaez comentó que cada silla de montar del tipo charro tiene un costo de tres mil pesos y su reparación costaría dos mil 500 pesos.

Desde hace cuatro meses ha solicitado a la corporación policíaca el cambio de las sillas, sin que hasta la fecha se adquieran las monturas.

Cada año el gobierno municipal invierte aproximadamente 360 mil pesos en la alimentación de los equinos, en promedio cada día cada uno come 10 kilogramos de mezcla de granos y pasto. Los caballos tienen una jornada de trabajo de cuarto horas diarias.

La Subdirección de la Policía Montada tiene una plantilla de nueve elementos, incluido el encargado del área.

El jefe de la policía montada descartó que esta área desaparezca, debido a que existen lugares en Cozumel donde no pueden acceder los vehículos motorizados y los caballos pueden abrirse paso entre la maleza.

En caso de manifestación, el portar los equinos puede disolver el conflicto, ya que su presencia impone respecto, aseguró.

Algunos policías que solicitaron no ser citados, comentaron que este agrupamiento debe desaparecer, ya que las actividades de vigilancia se pueden hacer en motocicletas para reducir gastos.

(Edición: Florencio Sabido)