Abigail Becerra/SIPSE
CANCÚN, Q.Roo.- Ciudades ordenadas con viviendas que tengan los servicios elementales de agua, drenaje y energía eléctrica, así como la implementación de ecotecnologías sustentables más amables con el medio ambiente, son el objetivo de esta administración.

Javier Carlos Olvera Silveira, actual presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Promoción y Desarrollo de Vivienda (Canadevi), indicó que debido a que el sector de la construcción es la segunda industria generadora de empleo, durante su gestión promoverá la construcción de 17 mil viviendas de calidad con acceso a las personas que ganen de dos salarios mínimos en adelante, con una bolsa mayor a los 100 mil pesos por parte de subsidio del estado.

Explicó que el reto ahora no es construir casas con servicios únicamente, sino lograr dimensionar ciudades más compactas y mejor equipadas, de acuerdo con la Política Nacional de Vivienda que ha denominado el Ejecutivo nacional bajo el esquema de vivienda vertical, por lo que la participación de todos los actores crece y se complica.

Serán tres constructoras: Grupo Vivo, Sadasi y Urbi, las que tomarán en sus manos la construcción de dos mil viviendas verticales destinadas para el municipio de Benito Juárez, a través del rescate de espacios urbanos, con lo que daría mayor alcance y concentración de los servicios básicos a la población, que se ha extendido durante los 20 últimos años de forma horizontal con dirección hacia la periferia de las ciudades, apuntó.

Cada casa producida, explicó, tiene un costo fiscal sumamente alto en comparación con otros estados de la Península de Yucatán, por los permisos de cambio de suelo forestal a urbano, tala o de desmonte, conservación de especies y el arbolado urbano, además de ser el único estado del país donde la Secretaría de Salud exige una supervisión sanitaria de cada casa y castiga severamente la falta de este trámite, por lo que piden una exhaustiva revisión bajo la presencia del gobierno estatal.

Sin embargo, ante estas adversidades los desarrolladores otorgarán en esta administración casas de absoluta calidad con costos accesibles entre los 200 y 450 mil pesos.

Se espera superar para este período las 65 mil 641 viviendas, con la participación de los desarrolladores, así como el monto de inversión que fue más de 21.5 millones de pesos, y la generación de 107 mil 780 empleos anualmente, y de forma directa que generó la anterior administración, presidida por Leonardo Garrido Hurtado.