Javier Ortíz/ SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) inspeccionó el rancho “Los Rápidos”, ubicado entre los límites de Bacalar y Othón P. Blanco, el cual fue denunciado por presunta destrucción de flora y fauna.

Por espacio de varias horas, el grupo de inspectores recorrieron las instalaciones de ese centro recreativo, a solicitud de un grupo de integrantes del Ejido Juan Sarabia, quienes afirmaron que en el lugar se realizaban actividades violatorias en materia ambiental.

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El personal se concentró en el procedimiento aplicado para la extracción de agua del cuerpo lagunar, y solicitaron al propietario, Rodolfo Valle Villaseñor, del sitio mostrar los documentos de autorización de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), para el aprovechamiento del vital líquido.

Según el permiso mostrado, el líquido debería ser utilizado únicamente para sanear la cocina y posteriormente ser saneado para evitar alguna contaminación a la laguna.

El propietario del sitio explicó que una vez utilizado, el agua es despostada en dos biodigestores con capacidad para mil litros cada uno, y posteriormente retirado cada determinado tiempo por una empresa de la capital del estado, cuyos recibos de cobro fueron integrados al expediente que levantaron los inspectores.

Zona de cocina

Después del procedimiento de visita de Profepa, Valle Villaseñor, mostró el acta de inspección donde se descartó el desvío de aguas negras al cuerpo lagunar,  y aseguró que el líquido extraído, es solamente para limpieza en la zona de cocina.

De acuerdo con el entrevistado, la denuncia interpuesta, obedece a una revancha política al interior del núcleo ejidal Juan Sarabia, porque él es una de las principales personas que han exigido cuentas claras en el manejo de los recursos económicos.

Incluso, durante el encuentro con personal de la Profepa exhibió una constancia expedida y firmada por el comisariado, Martín Haro Cepeda, donde reconocen su propiedad y los cuidados de preservación al ecosistema.