Javier Ortiz / SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Un grupo de ciudadanos bacalarenses realiza un conteo de las zonas donde existen estromatolitos, carrizos, manglares y de reproducción del caracol chivita, que sirva de base para programas de concientización en la Laguna de Bacalar.

Tania Sol Portillo Martínez, conocida poetiza bacalarense, fue quien propuso llevar a cabo este censo de las riquezas naturales que forman parte del ecosistema lagunar, que consideró necesario para emprender acciones de preservación, programas de concientización y cuidado más certeros.

Subrayó que es del conocimiento público la existencia de estas estructuras rocosas dentro del cuerpo lagunar, pero la mayoría de los ciudadanos desconocen con exactitud en qué parte de la laguna se encuentran.

Manifestó que la información que recabarán, permitirá a las autoridades, instituciones y estudiosos del tema, contar con elementos precisos para desarrollar su trabajo, pero sobre todo, focalizar campañas de cuidado y preservación de los mismos.

Los Rápidos de Bacalar

Destacó que existe un estudio previo que llevó a cabo Luisa Isaura Falcón Álvarez, investigadora titular del Laboratorio de Ecología Bacteriana de la Universidad Autónoma de México (UNAM) y la intención es actualizar la información, que determinará el daño que ha sufrido el cuerpo lagunar, de modo que sirva de base para la realización de programas de concientización.

Edwin Cano Álvarez, presidente de la Asociación de Prestadores de Servicios Náuticos de Bacalar, recordó que el año pasado, la Universidad de Quintana Roo Campus Cozumel, inició un estudio de este tipo, pero por cuestiones presupuestales lo suspendieron y hasta el momento no ha vuelto a ser retomado.

 La intención de dicho estudio, era determinar la carga que puede soportar la laguna, en virtud del aumento de actividades humanas que han comenzado a registrar deterioro para el ecosistema lagunar.