|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencia
CANCÚN, Q. Roo.- Si eres de las personas que por más que intentan no pueden resistirse a una buena barra de chocolate, a pesar de que el verano esté en su mejor momento y la pancita quede expuesta en la playa, entonces tienes que leer esto.

De acuerdo con el portal de noticias BBC Mundo, en el programa de la BBC "Confía en mí, soy médico", se investigó cómo lograr que las personas reduzcan su antojo al chocolate; la respuesta fue: imaginación.

Se invitó a más de 200 entusiastas del chocolate a participar en un experimento contra intuitivo diseñado por el profesor Carey Morewedge de la Universidad de Boston.

También te puede interesar: Cenar con música clásica hace comer de más... ¿lo sabías? 

Una vez que todos estaban reunidos en el Merchant Adventurers Hall (Centro de los Aventureros Mercantes) en York, Inglaterra, se dividió a los voluntarios en dos grupos.

Al primer grupo se le pidió imaginar que estaban comiendo 30 chocolates, uno por uno; tenían que pensar que los masticaban lentamente; lo cual les llevaría mucho tiempo.

El segundo grupo tenía que hacer lo mismo, pero tenían que imaginar que comían sólo tres chocolates.

Cuando terminaron se les pidió a cada uno que llenaran un formulario complicado. Pero aquí estaba el engaño: Lo importante no era lo que escribieran en el formulario, sino lo que hacían con los tazones de chocolates que estaban ‘casualmente’ en la mesa dónde estaban llenando sus formularios.

Vigilados

Los voluntarios no tenían idea de que estaban siendo vigilados. El profesor Morewedge apostó que el grupo al que se le había pedido que imaginara comer muchos chocolates comería menos.

Y estaba en lo correcto. El grupo que había imaginado comer 30 chocolates comió 37% menos que el grupo que se imaginó comer tres.

Pero ¿qué estaba ocurriendo? Cualquiera hubiera pensado que la mejor forma de dejar de comer chocolate era evitar pensar en ello, o no tenerlo cerca de nosotros.

"Cuando tratamos de evitar algo o tratamos de dejar de pensar en ese algo, inmediatamente comenzamos a pensar en ello"

"Intuitivamente eso tiene sentido" dice el profesor Morewedge, "pero cuando tratamos de evitar algo o tratamos de dejar de pensar en ese algo, inmediatamente comenzamos a pensar en ello".

Cuando la gente trata de suprimir pensamientos, tiende a activarlos. Así que en lugar de luchar contra el antojo de chocolate, el profesor Morewedge piensa que debemos forzarnos a pensar repetidamente en su sabor, en masticar y tragar ese alimento que ansiamos, esto debe conducir a lo que se llama "habituación".

Segunda parte del experimento 

Para comprobar esta teoría se envió a los voluntarios a sus casas con una bolsa grande chocolates y se les pidió que cada vez que tuvieran ganas de comer algo de chocolate hicieran la misma tarea de imaginación que habían hecho en nuestro experimento.

Los del primer grupo debían imaginar que comían 30 chocolates, los del segundo grupo tres chocolates.  Después de un plazo se les pidió que contestaran otro cuestionario en el que sí interesaban las respuestas.

Aunque no funcionó para todos, en promedio el grupo que había practicado "imaginar que comía 30 chocolates" informó que había tenido menos antojo de chocolate que el otro grupo que sólo había imaginado comer tres.

Hay evidencia de que este enfoque puede funcionar para otros antojos (se ha usado para reducir el ansia de comer queso, además de la de chocolate), y sería interesante probarlo con adicciones más serias, como la del tabaco o el alcohol.

Lo más leído

skeleton





skeleton