Javier Ortiz/SIPSE
CHETUMAL, Q. ROO.- La urgencia por endurecer las medidas de protección al caracol chivita motivará que el Congreso del Estado emita un punto de acuerdo, dirigido al Ayuntamiento de Bacalar, para que fortalezca las medidas para evitar la extracción del molusco, a unos meses que inicie su reproducción en la Laguna de los Siete Colores.

Juan Manuel Herrera, diputado por el distrito local III con cabecera en Bacalar, indicó que para integrar la propuesta, se reunirán estudiantes de la Universidad de Quintana Roo, que han llevado a cabo estudios al respecto, la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente, Ecosur y otras instancias que pueden colaborar a mejorar esta medida.

“Más que una veda, por lo tardado que representa, lo que se busca es una protección inmediata y consideramos que con un punto de acuerdo, se puede conseguir, la cual determinaría sanciones para las personas que extraigan el molusco de manera furtiva”, indicó.

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En peligro de extinción 

Reconoció que urge adoptar medidas que protejan esta especie en peligro de extinción, pues la falta de medidas severas, ha ocasionado que cada año se extraiga de manera indiscriminada, ocasionando con ello su sobre explotación y con ello, la merma de la población, a pesar que representa una parte importante en el eslabón del ecosistema del cuerpo lagunar.

Aseguró que en los próximos días se celebrará la citada reunión, a fin de estar a tiempo de presentar la iniciativa y que se pueda aplicar en el plano municipal, en la próxima temporada de reproducción del caracol chivita, que comienza a hacer su aparición en los meses de julio a octubre.

Apostó a la concientización ciudadana, como una de las medidas emergentes a realizar, ya que es una responsabilidad compartida entre autoridades y ciudadanos, para proteger la especie, por lo que afirmó que se llevará a cabo una campaña masiva de concientización, de modo que la ciudadanía colabore con este fin.

Un estudio realizado el año pasado, por el Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), reveló que la densidad de repoblamiento del caracol chivita en la Laguna de Bacalar, se registra a la baja, ante el crecimiento lento del mismo y a que no existen medidas determinadas para su preservación.