Eric Galindo/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Se presenta con sus víctimas como gestora social, les ofrece a las ancianas y promete que en una oficina del DIF, en la alcaldía de Puerto Morelos, les entregarán un apoyo de 700 pesos. Una de las ancianas se trasladó hasta ese lugar, pero vio que era un engaño cuando le dijeron que no daban ningún apoyo. Cuando llegó a su vivienda le habían robado dinero y alhajas. La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) tiene conocimiento de tres casos, sólo una agraviada ha denunciado.

El agente del Ministerio Público del Fuero Común (MPFC) inició la averiguación previa 7036/2014 por el delito de robo de 11 mil pesos y alhajas, en agravio de una mujer de 62 años de edad, originaria de Halachó, Yucatán, y con domicilio en la Región 227. La agraviada dijo que a finales de octubre llegó a su domicilio, una mujer, era de tez morena, cabello obscuro, de complexión robusta. La mujer le preguntó sobre el letrero donde anuncia la renta de cuartos.

La desconocida preguntó que en cuanto rentaba un cuarto, la agraviada le dijo que los rentaba en 700 pesos, después se retiró la mujer del lugar. La mañana del pasado martes, llegó a su domicilio la misma mujer, le dijo que había muerto su mamá y por eso no había regresado. Le pidió un vaso con agua y la llave de uno de los cuartos de renta. La sospechosa le comentó a la agraviada que la podía ayudar para que fuera beneficiaria del programa “oportunidades”, así como también a su marido y su nieto, incluso les tomó unas fotografías y a la casa.

El plan

La mujer fingió hablar con alguien, después les dijo que su crédito ya estaba autorizado, pero tendrían que ir al DIF de Puerto Morelos. De hecho, hasta los acompañó a que tomaran un taxi para que se trasladaran a ese lugar. En el puente, cerca de una estación de gasolina, los iba a esperar una licenciada. Llegaron al lugar, le estuvieron marcando a la persona que los iba a esperar, pero nunca les contestó. Se trasladaron a las oficinas del DIF de dicha alcaldía, donde les informan que los habían engañado, anteriormente habían ido dos ancianos a preguntar por el apoyo, pero este no existe.

Una mujer les dijo que se regresaran a su casa porque posiblemente les estaban robando, ya que todo se trataba de un engaño. Cuando llegaron a su domicilio encontraron todo revuelto, hacía falta un lote de alhajas de oro y 11 mil pesos en efectivo que tenía guardado la señora.