El 2 de octubre sí se olvida

Este año sufrió un significativo cambio con el suicidio del escritor Luis González de Alba, quien, como uno de los líderes del movimiento, era voz autoritaria en esta fecha.

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El pasado dos de octubre, aniversario de la Masacre de Tlatelolco, sucedió lo mismo que año tras año en épocas recientes: marchas y protestas ligeras se llevaron al cabo en varias ciudades y en redes circularon cientos de memorias, reportajes, crónicas y fotos de la matanza (en este día el exceso de información sobre “El 68” termina por cansar a los veinte minutos, pero lo verdaderamente triste es que el resto del año todos esos textos e imágenes quedan muertos en los archivos). Sin embargo, esta vez, el 2 de octubre sufrió un significativo cambio con el suicidio del escritor Luis González de Alba, quien, como uno de los líderes del movimiento, era voz autoritaria en esta fecha, tan relevante para su propia vida como ahora para su muerte. 

Dentro de su despedida, el autor de “Los días y los años” lanzó en uno de sus últimos textos la perfecta descripción de cómo los jóvenes de hoy conmemoran uno de los eventos más significativos para la historia contemporánea del país: “Una manifestación de chavos que no saben qué es lo que ‘no se olvida’ porque ya lo olvidaron o nunca lo han sabido.” Es verdad, a los de ahora nos importa poco qué fue lo que ocurrió en Tlatelolco, quizás porque estamos preocupados sobreviviendo a esta época tan salvaje.

“Los de ahora” olvidamos Tlatelolco cada vez que somos indiferentes a las represiones recientes y de las cuales hemos sido testigos (Atenco, Nochixtlán, Apatzingán, Tlatlaya, Ayotzinapa... la lista sigue). También olvidamos Tlatelolco cada vez que salimos a las calles a protestar sin verdaderos argumentos o cuando juzgamos sin conocer los hechos. Lo anterior se relaciona con algo que Luis tanto fomentó a través de sus textos y que deberíamos hacer con nuestros conflictos como sociedad: siempre hablar de lo que conocemos. Pareciera que González de Alba se mató para que no olvidemos el 2 de octubre.

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