Se fue enero con sus cabañuelas, próximamente los dignatarios mayas del clima se reunirán para cotejar la información recabada durante el mes recién concluido y ver si hubo coincidencias -vaya que si las hubo este enero con las cabañuelas- y analizarán qué nos espera para este año o más bien que nos podría esperar en los meses siguientes.

Llega el mes de febrero, segundo del año. La gente dice que febrero es un mes loco hablando meteorológicamente porque es un lapso en que hace frío, calor o llueve, con días de buen tiempo y jornadas de mal tiempo. Es un mes loco, dice la voz poipular, pero tiene explicación científica para ello: en febrero llega a su fin la fase más intensa de la temporada de frío, que abarca desde fines de diciembre, todo el mes de enero y parte de febrero.

La estación de invierno sigue vigente, hay que recordar que hasta el 21 ó 22 de marzo se inicia la primavera, por lo que los frentes fríos o nortes, como les decimos también, siguen llegando aún, pero simultáneamente empiezan los periodos de tiempo más estable o días de buen clima, todo esto provocado por los sistemas anticiclónicos que empiezan a posesionarse de la zona y que son los que causarán con su bloqueo que lleguen los frentes fríos a la región y a la vez propician la posible formación de nubes que provocan las lluvias.

El inicio en forma de la sequía y con ello la época de las quemas de las milpas por los campesinos yucatecos es a partir de la segunda quincena de febrero y terminará este lapso de ausencia de precipitaciones pluviales en el mes de mayo, cuando caen las primeras lluvias, pero, como les comentaba, aún podrán llegar los frentes fríos, por lo que habrá una combinación de días de frío y de calor y buen tiempo simultáneamente; de ahí el nombre de febrero loco.