Antes, el aleteo de una mariposa en la selva tropical podía desembocar en un tsunami en Xochimilco. Hoy, un balazo al aire puede producir una tragedia en un cine y una bronca interinstitucional entre la PGR y la SSP que está mucho mejor que la liguilla del panbol mexicano. Efectos mariposa más expeditos y estentóreos los que produce la legendaria Tetona Mendoza entre las buenas conciencias que, sin duda, ahora deben estar más a gusto con que la de por sí provocadora y feminazi criatura de los maeses Jis y Trino, ha sido contenida para la presentación de su película con el Santos. Como según esto al público mexicano se le alteran las tetas, La Mendoza ha sido transformada para fines publicitarios como La Voluptuosa. O sea, están peor que el gobierno de Nuevo León que como medida populista de austeridad rebajó el sueldo de los altos funcionarios, incluyendo el del gobernador Medina que se puso como Rajoy en España y habrá de echar a la calle a varios bonches de regios. Gente que las únicas rebajas que le importan son a la inseguridad.

Lo bueno que hay historias de éxito que nos devuelven la fe en la humanidad.

Dice Humberto Moreira, y con justa razón, que como nadie le creía que no sabía nada del denso endeudamiento de Coahuila siendo todavía gobernador, grabó el video donde el cerebro de toda esa compleja ingeniería financiera, Sergio Ricardo Fuentes Flores, ex administrador general de Políticas Públicas del Servicio de Administración Tributaria del Estado de Coahuila (puesto de nombre casi tan largo como los 5 mil millones), reconoce que el ex presidente del PRI es bueno, santo y puro.

Pero estas cosas no eran necesarias, sobre todo porque hay confianza en nuestros políticos. Aunque si ya se iba a tomar la molestia, lo mejor habría sido que se utilizara un equipo de mejor calidad. Digo, algo más profesional como el de Carlitos Ahumada, el voyeur de la vida galante, o ya de menos el utilizado por aquella chica que denunciara al ex delegado de Tláhuac, Rubén Escamilla, famoso por otorgar ascensos a cambio de acostones de oficina y hoy diputado perredista.

Y no es que uno le haga caso a los panistas de Coahuila, que menosprecian las revelaciones del video que exalta la calidad moral de Moreria, acusando al personaje de clavarse en la onda mediática, sino que para la salvaguarda de su prestigio ante los embates de los sospechosistas, uno hubiera esperado que el asunto fuera grabado, mínimo, en Full HD.

Digo, para despertarle mariposas al espectador.

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