Mutaciones en vocales y acentos (4)

De eu se escucha [déuda] por deuda, como ocurre en muchas regiones del país

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Aunque se observa cierta disminución en el empleo de las mutaciones vocálicas y acentuales, como resultado de la educación escolarizada aún subsisten en el habla popular y vulgar del yucateco algunos fenómenos fonéticos. Por ejemplo, en las mutaciones acentuales entre vocales que concurren, puede observarse que cuando el acento está en la vocal más cerrada, éste pasa a la más abierta en la pronunciación rápida: del grupo ai se observa la diptongación silábica en: maíz [máis], caído [cáido], distraído [distráido], país [páis], raíz [ráis] y aínas [áinas]. La voz gallina queda en [gáina].

Del grupo au son frecuentes baúl [bául], Raúl [Rául]. Del grupo ae se observa con marcada tendencia al cierre de la e hasta reducirla a i: maestro [máestro, máistro], Micaela [Micáila]. Del grupo ei se registran: creído [créido], increíble [incréible], leído [léido].

De eu se escucha [déuda] por deuda, como ocurre en muchas regiones del país; [reúma] por reuma, aunque actualmente la RAE acepta como correctas ambas formas. De oi se encuentra la mutación acentual en oído [óido].

Cuando concurren en una frase dos palabras con vocales en contacto o cuando entre éstas hay una vocal más, suelta, son frecuentes las elisiones vocálicas así como las reducciones de estos fonemas a otros más cerrados hasta fundirse en una sola pronunciación: ¿Qué te he hecho? [¿qué-techo?]; la hamaca [lamaca].

La e se elide ante i: me iré [miré]; te invito [timvito], pero ante a, o, u oscila entre la elisión o la reducción a i: trae acá [trayacá]; qué hubo [quiubo]. La o es absorbida ante u: no hubo nada [nubo nada], pero ante a, e, i por lo general se cierra y consonantiza y se reduce a w: no hay [nway]; no es para tanto [nwes pa tanto]; no ha abierto [nwabierto]. Cuando la preposición de se halla en una frase en posición intermedia, a veces cae la consonante inicial y la vocal restante también se elimina: una carga de maíz [una cargue máis]; dentro de un rato [dentrun rato]. La contracción de dos fonemas en contacto se observa entre consonantes nasales: en mi casa [emi casa]; con mi papá [comi-apá].

La supresión de la sílaba inicial se observa en las inflexiones del verbo estar cuando se halla en posición inicial y seguido de predicado: toy, ta, tamos, tan, tábanos por estoy, está, estamos, están, estábamos. Todas son formas de uso popular y fenómenos de carácter general en el español de otras regiones. Para más información véase Víctor Suárez Molina El español que se habla en Yucatán.

Lo más leído

skeleton





skeleton