A veces no es bueno tomarse la vida tan en serio, somos dueños de nuestra vida, pero al mismo tiempo no podemos decidir nosotros cuánto tiempo la tendremos.

 

Por lo general la sufrimos, nos angustiamos por situaciones que a veces, cuando volteamos, nos dan risa, nos aferramos a cosas o a personas que no pegan a nuestra vida por más que lo queramos ni siquiera cuadran o se acoplan a la nuestra, a veces nos limitamos por el qué dirán porque nos da pena decir o hacer lo que sentimos, y bueno tampoco es que nos volvamos imprudentes pues vivimos en una sociedad en la que si debemos comportarnos como se ha etiquetado “lo mas normal” digamos un general, pero el asunto es qué queremos para nuestra vida.

 

Creo que la mayoría nos empeñamos en sentirnos bien, felices, plenos hacer las cosas que nos gustan etcétera, aunque no todos se deciden a hacerlo porque realmente el “no poder” es un decisión nuestra.

 

Mientras estemos aquí y seamos dueños de nuestro tiempo y espacio, ¡todo lo podemos lograr!, así que empecemos…

 

Primero que nada quita lo que estorba, lo que creas te detiene a creer que no puedes lograrlo. Olvida a las personas que no quieran caminar contigo, las que ya no tienen nada que hacer en tu vida, ya a un lado, no te sirven de nada, ni se van a acoplar y si te roban la energía para seguir adelante, ¡estorban!, se escucha fuerte tal vez pero es la realidad.

 

No te sirven cerca es hora de pensar en ti nada más, aunque sea por un momento, y bueno no es que tengas que quitarlas a golpes, simplemente dale ya la vuelta a esa hoja junto con una historia que no se estaba escribiendo, después escribe cada una de las cosas que has dejado pendientes o simplemente no has ni siquiera intentado porque de antemano te das un no, y ve por ella empieza una a una a luchar a buscar todo lo que sea necesario para lograr hacerlas realidad.

 

No te esperes a hacer los típicos deseos de Año Nuevo, ve más allá de que sea un simple deseo, has escuchado esas frases que dicen que bailes como si nadie te estuviera viendo, que cantes como si nadie te estuviera escuchando, eso es lo que necesitas hacer en tu vida no veas, no oigas lo que los demás tengan que decir de lo que haces tú, será sólo su opinión aquí la opinión valida es la tuya solamente, pues es tu vida solo es cuestión buscar lo que quieres encontrar, y estar alerta para el momento en que debas brincarle encima a ese sueño para hacerlo realidad.

 

A veces tendrás que buscar un lugar alejado para poder gritar pues tal vez no lo puedas hacer en medio de un centro comercial, pero jamás reprimas un grito y ¡sigue adelante!.

 

Sonríe a la vida que es maravillosa no te agobies por dinero o por cosas materiales, la verdadera felicidad no la encuentras en una cartera llena de billetes la encuentras en el corazón de las personas en el abrazo de un niño, en el desinterés de quien quiera caminar contigo y acompañarte a ser feliz. 

 

¡Brinca, corre, vuela, canta y no mires quien te observa! 

 

Por lo general quien lo hace es porque no encuentra nada que ver en su vida, ¡tú ocúpate de la tuya! 

Si hay algo que hayas hecho y te arrepientas, no lo vuelvas a hacer y listo el arrepentimiento diario no te sirve de nada, sirve cuando la lección la aprendiste y no lo repites más, pero es mejor eso que arrepentirte de lo que has dejado de hacer y mas si es por el que dirán! 

 

¡Así que a vivir y a ir por lo que deseas!