Regina, EPN y Mead

'Al parecer, un hombre con máscara del secretario Mead robó ayer un banco. Es eso, o el verdadero Mead tiene un nuevo plan para reducir la deuda'

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Viernes de limpieza y de Regina que ayuda. Tiene lo que todas tienen, pero en proporciones perfectas. Dicen que el “amor” es la trampa de la naturaleza para asegurar la reproducción de la especie. Con Regina, la trampa no es necesaria.

“¿Cómo estás?”. “Don, la crisis está tan fuerte que en los partidos de futbol ya no echan volados. Empieza el que gane un piedra, papel o tijeras”. “Exageras, Regina”. “No. Es más, en los McDonalds ya no preguntan ‘¿Papas y Refresco?’, ahora es ‘¿Papas o refresco?’”. “Pues sí, Regina. Escuché que un hombre con máscara del secretario Mead robó ayer un banco. Es eso, o el verdadero Mead tiene un nuevo plan para reducir la deuda”.  

“Al que le va mal es al presidente, Don. Dicen que cuando pidió un deseo y apagó las velas en su cumpleaños, al abrir los ojos se entristeció porque seguía siendo presidente”. “Sí, no le va nada bien. Ayer reportaban alerta máxima de la guardia presidencial cuando un hombre se saltó la barda allá en Los Pinos. Se recuperó la calma cuando uno de los guardias convenció al presidente Peña de que regresara a Los Pinos a terminar el sexenio”. “Qué quieren, que renuncie, Don”. “Sí… pero no es razonable. Este país, no está preparado para algo así”.

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