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TECNOLOGÍA.- En uno de cada cuatro hogares, algún miembro sufre alergia o intolerancia a alimentos o ingredientes, según el informe “Consumidor sensitivo”, elaborado por Nielsen a partir de más de 30 mil encuestas en 63 países.

Además, este mismo estudio recalca que en una de cada tres familias se sigue una dieta que restringe o evita el consumo de algún producto, informó el portal El País.

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La alergia o intolerancia a la lactosa es la más común, al estar presente en el 10% de los hogares, mientras que en el 5% existen problemas similares relacionados con el gluten, los frutos secos o el marisco. Los afectados pueden llevar una vida saludable siempre y cuando eviten los componentes dictados por su alergólogo, gastroenterólogo o nutricionista, pero además, si necesitan una ayuda extra para facilitar su día a día, ahora pueden recurrir a alguna de estas aplicaciones móviles.

All I can eat

Nada más descargar esta aplicación, el usuario debe escoger sus intolerancias entre las siguientes opciones: lactosa, fructosa, histamina, gluten, sorbitol y ácido salicílico. A partir de ahí, accederá a una lista de alimentos marcados con un código cromático que va del verde al rojo, en función de la incompatibilidad con la dieta que debería llevar el paciente. Además, es posible ajustar ese grado de tolerancia según las recomendaciones personalizadas que el especialista haya dado al paciente, así como añadir nuevos alimentos que no se encuentren en la clasificación.

All I can eat está disponible para iOS y Android, aunque en este último caso hay que buscarla con otro nombre: Mi intolerancia alimentaria. Existe una versión de pago por 3,99 euros en Android y 4,49 euros en iOS para evitar la aparición de anuncios.

¿Qué puedo comer?

Parecida a la anterior, pero con una base de datos mucho más exhaustiva, ya que contiene información alergénica de más de 20.000 productos que incluyen alguno de estos ingredientes: leche, huevo, gluten, frutos secos, soja, pescado, crustáceos, apio, mostaza, sésamo, sulfitos, moluscos, altramuces, lactosa y fructosa. Eso sí, para su consulta esta aplicación exige un registro, mientras que All I can eat se puede utilizar sin identificarse.

Una de las funciones diferenciales de ¿Qué puedo comer? es que en su pantalla de inicio dispone de la opción Escáner, con la que es posible leer el código de barra de un producto y obtener una ficha del mismo donde se detalla si su consumo es apto o no en función del perfil del usuario. Como contenido extra, esta aplicación proporciona un apartado con recetas de cocina y otro con promociones (sorteos y códigos descuento).