Los cerebros detrás de Google, Facebook y 3D Robotics

Los fundadores de estas compañías fueron impulsados por mentores que les aportaron conocimientos fundamentales en el inicio de sus proyectos.

|
Mark Zuckerberg, de Facebook (izq), considera que Steve Jobs fue su guía principal. (YouTube.com)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Alejandro Guzmán/Milenio
MÉXICO, D.F.- Google, Facebook y 3D Robotics hoy son reconocidas como empresas innovadoras y exitosas, sin embargo, estos logros no hubieran sido posibles sin la presencia y acompañamiento de personajes que fueron guías para cada uno de los fundadores de esas compañías.

Los creadores de Google, Larry Page y Sergey Brin —por ejemplo— contaron con la mentoría de Rajeev Motwani, investigador de ciencias de la computación y quien fue su profesor en la Universidad de Stanford.

Rajeev fue guía en aspectos técnicos y de organización durante el surgimiento de Google, cuando era un proyecto de investigación en Stanford, y más tarde fungió como consejero de Page y Brin cuando la empresa ya había salido al mercado.

“Hoy en día, cada vez que se usa una ‘pieza de tecnología’, es muy probable que detrás de ésta haya un poco de Rajeev Motwani”, escribió Sergey Brin en su blog en 2009 tras la muerte de su mentor.

Otro caso de mentoría es el de Mark Zuckerberg, confundador de Facebook, quien considera que Steve Jobs —fundador de Apple— fue su guía principal. De acuerdo con medios internacionales, Zuckerberg ha afirmado que Jobs le dio consejos sobre cómo integrar un equipo encaminado a “la alta calidad y las cosas buenas”.

Dos casos mexicanos

Para el fundador de la empresa fabricante de drones 3D Robotics, Jordi Muñoz, su caso y el de Tito Quiroz —creador de una academia para llevar música a orfanatos, tutelares y asilos— son “pedradas” para los mexicanos, ya que ambos tuvieron el apoyo de mentores extranjeros. 

“No nos ayudamos entre nosotros ni trabajamos en equipo”, sostiene Muñoz, quien recibió el Premio Nacional de la Juventud en 2015 en la categoría Ingenio Emprendedor, debido al éxito y crecimiento de su compañía, que actualmente emplea a 350 personas y tiene ingresos anuales por 90 millones de dólares.

Jordi recibió la asesoría técnica y el apoyo económico del físico y editor Chris Anderson en sus primeras pruebas para desarrollar su propio drone, a quien conoció en el sitio DIY Drones. 

Por su parte, Tito Quiroz aprendió a tocar el violín gracias a las enseñanzas de Nancy Benning, misionera y profesora de música, a quien conoció a los siete años en el orfanatorio donde vivía.

Quiroz recibió el Premio Nacional de la Juventud 2015 en la categoría Compromiso Social.

Lo más leído

skeleton





skeleton