Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Adrián R.M. y/o Adrián J.D., mantenía asolado a los bacalarenses con sus constantes robos, por el cual le fincaron ocho expedientes, pero salió libre y se encuentra a salto de mata porque volvió a delinquir.

De acuerdo con fuentes consultadas al interior de la Fiscalía General del Estado, señalaron que hace poco menos de 15 días fue aprehendido tras ser señalado directamente por sus víctimas; sin embargo, el juez le concedió la libertad bajo el argumento de que los robos no fueron realizados con violencia. Le fijó una fianza de ocho mil pesos para pagar en lapso de una semana.

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Hace dos días nuevamente robó en un hotel que  contaba con cámara de vigilancia y se encuentra a salto de mata porque ya le pisan los talones.

“El Chivo”, como apodan al sujeto, se le relaciona con la carpeta FGE/QR/FCP/02/60/2017, por delitos que cometió en la comunidad de Noh Bec, donde estuvo a punto de ser linchado por los pobladores que se hartaron de sus tropelías.

Se le vincula en el asalto a la tienda de abarrotes La Moderna, en la comunidad de Limones donde fue grabado por cámaras de seguridad; otros expedientes que obran en su contra son: FGE/QR/BAC/06/355/2017, por el delito de robo, iniciada el día 08/06/2017.

Así como la FGE/QR/BAC/06/369/2017, por el mismo delito iniciada el día 14/06/2017; FGE/QR/BAC/06/379/2017, iniciada el día 16/06/2017; FGE/QR/BAC/06/411/2017, iniciada el día 26/06/2017; FGE/QR/BAC/06/412/2017, iniciada el día 26/06/2017, en todos los casos por el delito de robo.

También fue identificado en el robo a casa habitación de una regidora de Bacalar, así como en el mini súper "Don julio" de la ciudad de Bacalar, de quien está pendiente su denuncia. A pesar de ello, fue liberado porque no utilizó violencia.

Miguel Ángel Ferral, regidor de Seguridad Pública y Tránsito del Cabildo de Bacalar, dijo que hace falta que las instancias legales correspondientes apliquen la ley de manera correcta, porque estas personas al ver que no se les sanciones o al ser liberados, simplemente se les hace costumbre hacerlo en perjuicio de la ciudad, quien a su vez siente como una pérdida de tiempo denunciar cuando de antemano saben que serán liberados.