Agencias
CHICAGO, EU.- Los adolescentes con Trastorno de Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) registran en edad adulta un deterioro de su salud física y mental, personalidad antisocial, alto estrés, rendimiento laboral y problemas financieros.

De acuerdo con un estudio que difunde la Academia Estadunidense de Pediatría (AAP), persiste una escasez de estudios sobre jóvenes con TDAH seguidos hasta edad adulta, por lo que se enfocaron en analizar el mal en este segmento de edad y su vinculación con el crecimiento.

El grupo de investigadores coordinado por Judith S. Brook, de la Universidad de Nueva York, realizó el estudio "TDAH en adolescentes, salud física y mental de adultos, el desempeño laboral y las tensiones financieras".

El equipo realizó seis exámenes de los participantes que abarcaron edades de 14 a 37 años, con dos evaluaciones de referencia tomadas entre los 14 y 16 años, y otras cinco a una edad promedio de 37 años.

Los participantes fueron evaluados mediante entrevistas estructuradas, aunque procedían de una muestra comunitaria inicialmente elaborada en 1975 y seguida hasta una edad promedio de 37 años en 2009.

Los resultados mostraron relación entre el TDAH y la tensión interna en la edad adulta que se manifestó en un deterioro de la salud física y mental, personalidad antisocial, rendimiento laboral deficiente, alto estrés y problemas financieros en la edad adulta.

Los autores recomendaron a los médicos centrarse en el diagnóstico precoz y el tratamiento del TDAH adolescente, debido a que es un predictor importante de una serie de problemas físicos, mentales, laborales y financieros en la edad adulta.

Un estudio más que se publica en la revista Pediatrics de la AAP sugiere que la asfixia neonatal, síndrome de dificultad respiratoria, y la preeclampsia están asociadas de forma independiente con el TDAH, vinculación que es más fuerte en los nacimientos prematuros.

El análisis encabezado por Darios Getahun, de la Universidad de California, incluyó a 308 mil 634 niños y niñas de cinco a 11 años que fueron atendidos entre 1995 y 2010 con diagnóstico de TDAH y recibieron dos prescripciones específicas durante el período de seguimiento.

Los resultados mostraron que entre los participantes, 13 mil 13, el 4.3 por ciento, tuvieron un diagnóstico de TDAH y tenían más probabilidades de ser niños de raza anglosajona estadunidense o etnia africana.