Mexicano batalla contra súper bacterias

La investigación busca fortalecer programas de epidemiología en hospitales a fin de evitar las infecciones de esos patógenos en los pacientes internados.

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Gerardo Aparicio Ozores, doctor en microbiología de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas, ha trabajado durante una década en diversos proyectos en torno a la resistencia de diversos microorganismos. (Milenio)
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Milenio
MÉXICO, D.F.- Gerardo Aparicio Ozores, científico del Instituto Politécnico Nacional (IPN), trabaja en la detección de genes y caracterización de elementos que intervienen en la resistencia de las bacterias a los antibióticos, con el propósito de contar con mayor información que contribuya a fortalecer los programas de epidemiología en los hospitales.

Aparicio Azores, doctor en microbiología de la Escuela Nacional de Ciencias Biológicas (ENCB), ha trabajado durante una década en diversos proyectos en torno a la resistencia de diversos microorganismos.

El experto se ha enfocado en la bacteria Pseudomonas aeruginosa, uno de los 10 principales patógenos que causan infecciones de gravedad en pacientes internados en los hospitales, detalló el IPN en un comunicado.

Panorama complejo

El panorama para tratar esta bacteria, explicó, es muy complejo, porque presenta una resistencia intrínseca a múltiples antibióticos, por eso es responsable de infecciones intrahospitalarias de difícil tratamiento y elevada mortalidad.

El especialista señaló que esa bacteria puede causar infecciones en vías las urinarias y la piel de pacientes quemados o con cáncer; además, es común que ocasione neumonías en enfermos en la unidad de cuidados intensivos y también los que padecen fibrosis quística son blanco fácil.

El experto detalló que “en las últimas décadas se ha demostrado que en esta gran diversidad que tienen las bacterias, unas poseen mayor potencial de intercambiar información genética y en otras esa capacidad es más reducida, lo cual determina el nivel de resistencia”, explicó.

Su investigación reveló un panorama desolador: un número importante de cepas presenta resistencia ampliada a los antibióticos de elección —los que normalmente se usan para el tratamiento infeccioso— y otras incluso son consideradas panresistentes (invulnerables a todos los fármacos).

“Hemos encontrado en un amplio número de cepas el fenómeno de resistencia ampliada. Esto implica riesgos para el paciente, porque tiene menos posibilidades de tratamiento, ya que si el número de antibióticos a los que es resistente la bacteria es alto, disminuyen las posibilidades terapéuticas”, apuntó.

Abundó que ha encontrado genes a nivel molecular de la bacteria que solo habían sido descritos en Europa, lo que significa que la adquirieron mexicanos que viajaron o la trajeron extranjeros.

“Esto marca pautas de bacterias con un potencial de adquirir más factores de resistencia y nos deja un panorama cada día más crítico”, aseguró.

Trabajo conjunto

El científico realiza investigaciones en colaboración con especialistas de la UNAM, de los institutos Nacional de Pediatría y de Perinatología, del Hospital de Infectología y del Centro Médico Nacional La Raza, del IMSS.

En las reuniones de trabajo con los médicos, determina que los individuos a estudiar reflejen procesos infecciosos causados por bacterias, para que cuando el laboratorio realice los aislamientos se tenga la correlación de los pacientes y los patógenos que se aislaron de cada uno, así como cuál fue la causa de la infección, las consecuencias, los tratamientos a los que fueron sometidos y los resultados de estos.

“Con base en esa información determinamos adónde queremos avanzar. Nuestro principal objetivo en este momento es indagar el mecanismo que a nivel molecular está implicado... Esto permitirá entender cómo se dispersa el fenómeno de la resistencia a escala mundial”, afirmó.

Aparicio Ozores destacó la necesidad de que los comités de vigilancia y control de las infecciones intrahospitalarias establezcan políticas estrictas en torno al uso prudente de los fármacos.

No obstante, manifestó que disminuir el fenómeno de la resistencia es una labor conjunta y la sociedad también tiene la responsabilidad de utilizarlos adecuadamente y administrarlos en el tiempo y horario indicados por el médico.

“Es muy importante la cultura de la prevención, la cual inicia con el constante lavado de manos, pues no importa cuántos antibióticos o productos con actividad antimicrobiana se desarrollen, ya que se ha comprobado que prácticamente no existe ninguna molécula que esté exenta de la resistencia”, advirtió.

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