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CIUDAD DE MÉXICO.- Las dietas requieren mucha fuerza de voluntad, pero en ocasiones caer en la tentación es inevitable, en especial cuando se lleva varios días comiendo lo mismo, sin embargo; te daremos el mejor tip para evitar que rompas la dieta.

Como bien sabes, el olfato es un sentido muy poderoso. Tanto, que oler la comida por dos minutos podría ayudarte a combatir esos antojos de comida grasosa.

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Aunque no hay nada malo en comer alimentos grasos a veces, puede ser difícil tratar de comer de manera saludable y ampliar las opciones de alimentos cuando estás constantemente rodeada por todos esos olores grasos o azucarados.

En sólo dos minutos puedes evitar romper la dieta

Sin embargo, un nuevo estudio encontró que este truco de dos minutos puede detener los antojos.

¿Cómo funciona? El cerebro es súper complicado, pero a veces también puede ser fácil de engañar.

De acuerdo con el estudio recientemente publicado en el Journal of Marketing Research, el olor es considerado como un elemento importante en los entornos de servicio, especialmente en los relacionados con los alimentos.

Los investigadores sabían que el olor de los alimentos grasos puede hacer que su deseo se manifieste. Pero, según Science Daily, respirarlo durante más de dos minutos puede hacer que esos deseos desaparezcan.

Para el estudio, los investigadores realizaron varias pruebas con un "nebulizador discreto", que desprendía el aroma de alimentos tanto saludables como no saludables.

Aparte, los investigadores prepararon galletas, fresas, pizzas y manzanas.

El resultado fue que las personas que olían las galletas durante menos de 30 segundos tenían más probabilidades de querer una. Sin embargo, cuando los participantes olieron las galletas durante más de dos minutos, eligieron fresas.

Lo mismo sucedió cuando se probó el olor de la pizza y las manzanas.

El autor principal, Dipayan Biswas, dijo que "el aroma ambiental puede ser una herramienta poderosa para resistir los antojos de alimentos indulgentes. De hecho, los estímulos sensoriales sutiles como los aromas pueden ser más efectivos para influir en las elecciones alimentarias de niños y adultos que las políticas restrictivas".

Así que en lugar de pensar en que tienes prohibido comer algo, mejor 'pruébalo' con el olfato por dos minutos y listo, tu cerebro quedará satisfecho.