Agencias
MADRID, España.- Un reciente estudio sobre salud pélvica y sexual en España, realizado por American Medical Systems (AMS) ha revelado que el 80 por ciento de los hombres españoles catalogan como normal el tener problemas de erección. Y un 91 por ciento no sabe con certeza qué es exactamente la disfunción eréctil.

A pesar de la ligereza con que la parece tratarse este tema en España, el citado trastorno afecta de gran manera a la calidad de vida de las parejas, puesto que el 51 por ciento de los hombres han manifestado en alguna ocasión una disfunción que ha influido negativamente a su autoestima y ha provocado que se sintieran avergonzados con su pareja. Tanto es así que el 60 por ciento de los afectados confiesa haber disminuido, por esta razón, la periodicidad de sus relaciones íntimas.

El citado trabajo de investigación ha demostrado que un 72.6 por ciento de hombres ya saben lo que es (y han experimentado) la disfunción eréctil, con lo cual pueden hablarlo abiertamente con su pareja. Pero a pesar de la confianza que pueda existir entre ambos, siete de cada 10 españoles tienen miedo de volver a manifestar síntomas de impotencia. Ocho de cada 10 revelan no haber informado de su caso a un médico en la vida. 

La mayoría de ellos (un 44 por ciento) cree que no es necesario por ser un fenómeno puntual y pasajero. También son un buen número (un 26 por ciento) los que piensan que las causas psicológicas son las verdaderas culpables de su fallo sexual, seguidos de los que rechazan ir al urólogo por sentirse cohibidos e inseguros (el 22 por ciento). Finalmente, tan sólo el siete por ciento afirma que el especialista no podrá solucionar su problema de forma efectiva.

Si bien es cierto que el temido “bajón” suele darse de manera puntual, estaríamos hablando de verdadera impotencia o de disfunción sexual cuando éste tiene lugar en sucesivas ocasiones. La erección no puede completarse de manera satisfactoria ni durante el tiempo necesario como para comenzar la penetración y llegar a culminar el acto sexual.

Más allá de lo que puedan creer los hombres en España, a la hora de buscar un único culpable hay una cosa clara: los factores que propician la aparición de esta disfunción masculina son muchos y variados, por eso lo más indicado es acudir a la consulta del urólogo para recibir un adecuado diagnóstico. 

Los motivos habituales que provocan este problema son el sedentarismo (falta de ejercicio físico y sobrepeso), la mala alimentación (con predominio de la comida hipercalórica, de alto contenido en sal, grasa y azúcares), los estados nerviosos (estrés laboral) y los desbarajustes hormonales (baja testosterona, tratamientos que pueden alterar la producción de estas o provocar la pérdida paulatina del deseo sexual).

Igualmente, es conveniente saber que también existen enfermedades muy comunes entre la población que están asociadas a la disfunción eréctil y la llegan a provocar de manera directa: la diabetes mellitus, el tabaquismo, la tensión arterial alta, los niveles elevados de colesterol y el avance de la edad. 

De manera que, antes de realizar un enjuiciamiento prematuro del problema, conviene conocer muy bien todos los factores que pueden hacernos pasar un mal rato. 

(Con información de es.meds4all.com)