Con el inicio del tradicional y conocido maratón Guadalupe-Reyes, llegan jornadas de celebración, especialmente por la noche, en las que el consumo de alcohol suele ocupar un lugar central. 

Esta temporada festiva se convierte para muchos en la oportunidad ideal para brindar y disfrutar de momentos de relajación.

Sin embargo, para quienes están en recuperación y buscan mantenerse alejados del alcohol, o simplemente prefieren no consumirlo, estos días pueden ser desafiantes debido a la presión social que se percibe en reuniones familiares y entre amistades. 

“Entre la familia nunca falta el: '¿Qué te hace un traguito no más?'. Por eso mucha gente vuelve a beber”, afirma Felipe, integrante de un grupo de Alcohólicos Anónimos.

(Foto: Canva)

Voluntad y fuerza por un lado: empatía y respeto por el otro 

Es una temporada que pone a prueba la voluntad y fortaleza de estas personas, pero también la empatía y el respeto que sus familias y entornos cercanos demuestran hacia la lucha de dejar la bebida. 

Con apenas consumir una gota de alcohol se echa abajo el trabajo de meses, incluso años, dice Felipe, de 58 años, quien lleva cuatro décadas acudiendo a AA. 

"Volvemos a estar igual o peor que como estábamos. Este problema del alcoholismo no es así de que ya, dejo de tomar y todo arreglado. Tarde o temprano puedo volver a caer".

Esto también enfrentan personas que no suelen ser afectas a consumir bebidas alcohólicas y que, por ceder a la presión social, no la pasan nada bien en las reuniones. 

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Alcohol, ¿igual es igual a diversión?

Las personas en rehabilitación utilizan palabras como ‘riesgo’, ‘fechas de prueba’ o ‘reto’ para referirse a esta época, dice Juanita Sosa, directora de la unidad de hospitalización de los Centros de Integración Juvenil en Monterrey.

"Hemos tenido casos de pacientes que tienen su fecha programada para terminar su tratamiento por estos días y nos han pedido que extendamos el tratamiento".

"Nos dicen: '¿No podría salir de tratamiento hasta después del día último?' Saben que en casa y en los alrededores va a haber gran consumo de alcohol, que va a estar el estímulo de personas bebiendo y de bebidas disponibles alrededor".

Y es que las invitaciones a beber se convierten en una fuerte presión con expresiones como: '¿Cómo que no vas a beber?', '¿a poco no vas a tomar?' o '¿me vas a despreciar?'. Esas frases están muy naturalizadas, explica la directora de CIJ.

"Tenemos fuertemente asociadas la convivencia y la diversión con el alcohol", afirma.

¿Qué hacer en estos casos? 

La especialista en prevención y tratamiento de adicciones recomienda que la persona identifique un entorno seguro donde no se consuma alcohol durante esta época, y mantenerse ahí.

Lo ideal, señala, es que este espacio seguro sea la familia o acompañarse por algún miembro de ella que no consuma. De no haberlo, el consejo es mantenerse aislado de la convivencia.

“Es importante que la familia comprenda que, sin bebidas alcohólicas, se puede pasar una velada divertida”.

Esta perspectiva resulta difícil de asumir, pero es útil tanto para las familias de alguien que lucha contra una adicción al alcohol, como para un sector de la sociedad que no suele beber ni requiere alcohol para divertirse.

También, dicen los especialistas, porque hay que pensar en las niñas, niños y adolescentes alrededor.

"Es probable que los menores no prueben alcohol durante estas convivencias", señala Sosa, "pero están aprendiendo a naturalizar el consumo cuando hay festejos".

Consejos para facilitar el ‘NO’

Si has decidido dejar de beber, reducir tu consumo o simplemente tomarte un descanso del alcohol, comunicar tus nuevas intenciones a amigos y compañeros puede ser muy beneficioso. 

• No es necesario que la conversación sea formal; basta con que menciones de manera casual tus nuevos hábitos durante interacciones cotidianas. Lo importante es que quienes te rodean comprendan que este cambio es real y significativo para ti.
• Puedes decidir si deseas compartir las razones detrás de tu decisión. No estás obligado a dar explicaciones, pero hacerlo podría ayudar a que los demás entiendan mejor tu perspectiva y apoyen tu elección.

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Es posible que algunos en tu entorno no reaccionen de la mejor manera. Sin embargo, no permitas que comentarios negativos te afecten.

Enfócate en aquellas personas que te brindan apoyo y comprensión; son ellas quienes te ayudarán a mantenerte firme en tu camino hacia un estilo de vida más saludable.

Con información de Reforma