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CIUDAD DE MÉXICO.- Ante el silencio total que han hecho las autoridades del Fútbol Mexicano, por los lamentables acontecimientos que ocurrieron previo al Clásico Regio entre los equipos de Tigres y Rayados, fueron los aficionados de ambos equipos los que levantaron la voz.

De acuerdo con vanguardia.com, luego de lo ocurrido a unos cuantos kilómetros del Estadio Universitario de la UANL, los aficionados de los dos equipos llevaron a cabo un pacto por la paz, que busca hacer conciencia en los seguidores al fútbol, para que entiendan que este deporte lo que busca es que exista alegría y armonía dentro de una comunidad.

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Muy diferente a lo que ocurrió al aficionado de Tigres, Rodolfo Gámez, quien sólo por encontrarse en el lugar y momento equivocado, terminó siendo agredido por miembros de la porra de Rayados, tan sólo por el hecho de portar colores diferentes en sus playeras y apoyar a diferentes equipos.

Los representantes de porras, tanto de Tigres, como de Rayados, se vieron hoy en la oficina del secretario general de gobierno del estado de Nuevo León, Manuel González, junto con directivos de ambos equipos.

Todos llegaron al acuerdo de mantener la paz en Nuevo León y lo dejaron plasmado en un documento que todos firmaron para hacerlo oficial.

Dicho grupo también acordó en realizar mesas de seguridad, que en un futuro realice el Gobierno, sobre todo previo a los Clásicos Regios, pero evaluar posibles medidas a tomar para evitar cualquier tipo de situación que se podría lamentar, como lo ocurrida el pasado 23 de septiembre.

También se llegó a un acuerdo de que las porras evitarán organizar caravanas y actos masivos que pudieran provocar a la afición del equipo contrario.

Todo acto, mensaje o uso de lenguaje que conlleven a una manifestación de odio o violencia contra el rival quedó estrictamente prohibido, con el uso de mantas, banderas, redes sociales y cánticos.

Tanto Tigres y Rayados publicaron este acuerdo histórico en sus respectivas cuentas de Twitter.