Agencias
SAO PAULO, Brasil.- El ministro de deportes de Brasil, Aldo Rebelo, confesó este martes la necesidad de acelerar las obras de los estadios que continúan en construcción para los encuentros de la Copa del Mundo 2014, pues al ritmo actual, no se concluirían a tiempo.

"Tenemos condiciones de cumplir los plazos, pero es necesario destacar que eso exigirá un ritmo mayor de las obras en relación al actual ritmo", reveló el ministro de deportes durante una audiencia en el Senado, informa Notimex.

La Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA) estableció como plazo hasta diciembre para que el país sudamericano entregue el restante de estadios para el Mundial del próximo año, pues en la Copa Confederaciones se probaron seis de los 12 inmuebles.

El plazo que fijó la FIFA se debió a que no quiere sufrir nuevamente los problemas a los que se enfrentaron en la Copa Confederaciones, como dificultades para el acceso a los inmuebles y fallas en el funcionamiento de algunas instalaciones.

"No lo vamos a negar o a esconder. El Mundial es una gran oportunidad para el ejercicio de nuestras virtudes y capacidades, pero al mismo tiempo una gran oportunidad para superar nuestros problemas y limitaciones", afirmó Rebelo.

Exceptuando el estadio Itaquerao, de Sao Paulo, que está finalizado en un 84 por ciento, los cinco restantes "están con el plazo más apretado, principalmente el de Manaos, que sólo cuenta con el 74 por ciento de las obras", señaló Rebelo.

En la pasada Copa Confederaciones, en junio, se pusieron a prueba los estadios de Río de Janeiro, Belo Horizonte, Brasilia, Recife, Fortaleza y Salvador, mientras que se espera para diciembre sean entregados los otros seis inmuebles, en Sao Paulo, Porto Alegre, Cuiabá, Curitiba, Manaos y Natal.

Según los datos oficiales, detrás del de Manaos, los más atrasados son los de Curitiba y Porto Alegre, ambos con 76 por ciento; Natal con 78 por ciento de avance y Cuiabá con 80 por ciento.