EFE
MADRID, España.- Diego Costa, delantero del Atlético de Madrid, sufre una lesión muscular de grado uno en el bíceps femoral, según informó el parte médico del club.

Sin embargo, el argentino Diego Simeone, su técnico, no descarta su participación en la final de la Liga de Campeones de la UEFA (UEFA Champions League) del próximo sábado ante el Real Madrid en Lisboa.

El futbolista fue sometido hoy a pruebas médicas, tras la lesión sufrida en el primer cuarto de hora del encuentro del pasado sábado frente al Barcelona en el Camp Nou, que detectaron que tiene una lesión muscular sin rotura, según afirmó el club, y está "pendiente de evolución" para el duelo por el título de la Copa de Europa.

Simeone afirmó que es duda. "Empezamos la semana hoy, así que faltan días y no vamos a adelantarnos ahora a decidir algo, porque me parecería muy pronto con un partido tan importante. Lo que está claro es que necesitamos un jugador en condiciones importantes para jugar un partido como el que vamos a jugar", dijo el técnico, que esperará "la evolución de Arda Turan y Costa hasta final de semana".

En ese sentido, en la rueda de prensa del día abierto a los medios de comunicación en el Vicente Calderón, también fue preguntado por si podría alinear a Diego Costa si existiera algún riesgo de lesionarse en la final de la Liga de Campeones, como ocurrió en el duelo de Liga del pasado sábado frente al Barcelona.

"Uno cuando entra un jugador no piensa que puede pasar eso, porque el trabajo y las sensaciones sobre todo del jugador es que está bien. Viene con una carga y está dentro de las posibilidades que pueda pasar. Está claro que uno no lo espera, porque sino tiene que hacer un cambio muy rápido", valoró.

También advirtió de que la final del próximo sábado "no es un partido para jugar al 80 por ciento". "Obviamente, necesitamos estar con gente que esté bien", agregó.

El Atlético podría convertise en el mejor de su historia, pues recién se coronó campéon en la Liga de España, lo que no lograba desde 1996, y el sábado podría convertirse en campeón de la UEFA Champions League, torneo al que ya había llegado una vez a la final, en 1974, pero la perdió ante el Bayern Munich.