Redacción
VERACRUZ.- Un triunfo de oro consiguió ayer el equipo de Veracruz, al imponerse 1-0 a Monterrey, resultado que le permitió dar un paso importante rumbo a la salvación en la Liga MX.

De acuerdo a Notimex, el cuadro jarocho estaba obligado a la victoria en este arranque de la fecha 16 del Torneo Clausura 2017 y cumplió ante sus seguidores en la cancha del Estadio Luis “Pirata” Fuente gracias a la anotación del uruguayo Egidio Arévalo al minuto 15.

De este modo, Tiburones Rojos alcanzó 21 unidades para ponerse en el octavo peldaño, por ahora estaría en liguilla, aunque lo más importante fue que llegó a 117 puntos en 101 juegos celebrados en la tabla porcentual para seguir delante de Jaguares y Monarcas en la lucha por el no descenso.

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Incluso los veracruzanos podrían amarrar la permanencia si este sábado Monarcas o Chiapas pierden, pero si ganan la quema del descenso se definirá hasta la próxima semana.

Los norteños se estancaron con 27 puntos y podrían bajar al cuarto puesto de la clasificación siempre y cuando ganen Toluca y Chivas de Guadalajara.

El técnico del Veracruz, Juan Antonio Luna, decidió repetir al once inicial que le dio la victoria la semana pasada en Ciudad Universitaria y la apuesta le funcionó al cien por ciento, ya que ganaron de nuevo, aunado al gran arropo de su afición que abarrotó las gradas.

Por su lado, Rayados, ya calificado a la “fiesta grande”, querían hacerse del liderato y para eso era importante ganar.

Sin embargo desde la alineación pareció que el estratega argentino Antonio Mohamed menospreció a su rival, pues su tridente ofensivo de lujo no inició: Dorlan Pabon sin convocatoria, Rogelio Funes Mori se lesionó en el calentamiento y Edwin Cardona comenzó en el banquillo.

A pesar de las diversas modificaciones el cuadro regio dejó en claro que tiene un equipazo, ya que de todas formas se hizo del dominio del partido, tomó el balón y se acercó a la meta del peruano Pedro Gallese, pero sin lograr el gol.

El experimentado Aldo de Nigris falló la ocasión más clara del primer lapso con un disparo a bocajarro que se fue por encima del horizontal y con muy poco Tiburones Rojos fue capaz de adelantarse en el marcador para después defender hasta con los dientes la mínima diferencia.

La anotación que puede valer una franquicia de Primera División fue obra del todo pundonor “Cacha” Arévalo, quien remató el recentro de Ángel Reyna para el 1-0, todo esto precedido por el mal rechace del portero Hugo González a disparo de Adrián Luna.

Una falla de la que ya no se podría recuperar Monterrey aunque fue más incisivo, pero sin hacer figura al guardameta de enfrente. El guión estaba cantado, un Veracruz que apostó a defender y un Rayados que aumentó el número de ofensivos.

En el último suspiro se fue expulsado el paraguayo Iván Piris por doble amarilla al 90+2, algo que simplemente quemó los últimos minutos para que Veracruz se hiciera del vital triunfo contra un rival que, si bien tiene una de las plantillas más poderosas, fuera de la sultana del norte es débil.

El árbitro del encuentro fue Marco Antonio Ortiz, quien cumplió con su labor: amonestó a los locales Fredy Hinestroza, Egidio Arévalo y Pedro Gallese, así como a los visitantes Jesús Molina, Iván Piris y Edwin Cardona, más la expulsión al propio Piris.