William Sierra/Milenio Novedades
MÉRIDA, Yucatán.- Todos los ingredientes que se pudieran necesitar, como bateo oportuno, filigrana defensiva y, por su puesto, efectivo pitcheo, tuvieron ayer Leones de Yucatán para sacar la escoba por décima segunda ocasión esta campaña, con una victoria de 6x2  sobre Acereros de Monclova, que combinado con el descalabro de los líderes Pericos de Puebla ante Diablos Rojos del México, quedaron a medio juego de la cima.

En lo que fue el “Día del Aficionado”, en el Parque Kukulcán Álamo, las fieras realizaron un ataque “a cuenta gotas”, es decir, de a una carrera, tras una ofensiva comandada por Jesús Valdez y Luis Alfonso García con par de remolcadas. Mención aparte igual merecen Humberto Sosa, con cuadrangular, y Diego Madero, quien destacó al ataque al irse de 4-2, incluido doble, con 3 estafas, entre ellas 2 a tercera, y 3 anotadas.

Triunfó Tomás Solís (6-4), quien comenzó certero y curiosamente a los 3 primeros que enfrentó los dominó  a cada uno con 5 envíos, aunque a Eugenio Vélez y Antonio Lamas, por la vía del ponche.

En sus siguientes cuatro episodios en los que se mantuvo en la loma, Solís no pudo retirarlas en orden, y aunque admitió dos carreras, la verdad es que pudieron haber sido mucho más, pues admitió ocho imparables, transfirió a uno y engomó a cinco.

Después desfilaron en la loma Óscar Félix, Jesús Barraza, Mario Meza y acabó “a tambor batiente” el venezolano Juan Carlos Gutiérrez, quien lanzó fuego a la loma con envíos de más de 90 millas. Perdió Sasagi Sánchez (1-6), primero de siete serpentineros.

En la segunda tanda, tras poner dos fuera, Eliseo Aldazaba dio sencillo, Manuel Alonzo también conectó imparable y Uriak Márquez bateó indiscutible para remolcar una carrera y en la misma jugada, el otro corredor fue puesto fuera en el plato, tras matemático tiro de relevo de Albino  Contreras a Madero y éste a Sosa.

Sánchez arrancó un poco frío, de ahí que desde el primer episodio le anotaron la de la “quiniela”, siendo una vez más Valdez el encargado de producirla. Eduardo “Mosco” Arredondo recibió pasaporte, pero fue atrapado y por mucho cuando trató de estafar la segunda. Madero siguió con imparable, se robó la intermedia, y aunque Contreras sorbió chocolate, el “Cacao” metió un batazo atrasado, débil pero suficiente para picar en terreno bueno en el bosque izquierdo para traer la de la quiniela.

Y no pasó mucho para que las fieras consiguieran su segunda anotación, e igual con dos fuera, empero ahora con un tablazo de largo alcance de Sosa por el jardín izquierdo, en el segundo acto.  Fue su cuarto bambinazo.

Una vez más con dos tercios fuera, los melenudos le anotaron otra a Sasagi Sánchez en la tercera. Albino Contreras dio jit, avanzó por wildpitch, el “Cacao” obtuvo la base, y sencillo de García envió al plato la anotación.

Solís igual batalló en serio en la cuarta, en la que desfilaron seis bateadores que no anotaron, pues  dejaron el lunetario repleto. Sin embargo, en la quinta, los del acero ya no desperdiciaron otra oportunidad de pisar el plato por segunda ocasión. Con un aut, Zazueta disparó doblete y alcanzó el pentágono con indiscutible de Lamas.

Y no podía faltar el sello del equipo, el juego agresivo, para anotar una más en la quinta entrada, en la que con uno fuera, Madero descargó un estacazo que se fue detrás de la barda de un pique para doble de terreno, inmediatamente se estafó la antesala. Contreras cedió el segundo aut con globo detrás de la media luna, el “Cacao” recibió pasaporte intencional, pero García estropeó la estrategia al empalmar imparable productor.

La fatal ofensiva de a un registro siguió en la séptima, teniendo como protagonista, una vez más a Madero y Valdez. El camarero melenudo bateó rola a las paradas cortas, donde Zazueta le llegó, pero al tirar a la inicial voló su disparo lo que aprovechó Madero para alcanzar la segunda y se estafó de nuevo la tercera base para ser remolcado por el “Cacao” con sencillo.

Los melenudos consiguieron la del remache en la octava al recibir Héctor Giménez base, Serrano cedió aut, pero Héctor Páez, de emergente, disparó doble para producir.