EFE
PALMA DE MALORCA, España.- El Mallorca ha descendido tras dieciséis temporadas consecutivas en Primera, en las que ha conquistado una Copa del Rey, una Supercopa y ha disputado las principales competiciones europeas, entre ellas, la Liga de Campeones.

La complicada carambola de resultados que debía producirse en la última jornada para evitar el descenso no llegó, y los mallorquinistas, muy a su pesar, ya son nuevo equipo de Segunda.

El ciclo glorioso del Mallorca, el mejor de sus 96 años de historia, ha llegado a su fin tras un año decepcionante, donde dos entrenadores, Joaquín Caparrós hasta el pasado mes de febrero y Gregorio Manzano, en el tramo final del campeonato, no pudieron evitar una caída que ya se vislumbraba desde hace semanas.

El Mallorca empezó a recorrer la senda hacia la Segunda división de manera inexorable golpeado por la inestabilidad en los despachos, con enfrentamientos entre consejeros y el máximo accionista, el ex entrenador Lorenzo Serra Ferrer,  una racha pertinaz de lesiones de jugadores clave, que rompió la planificación de la plantilla, y el rendimiento deficiente de algunos futbolistas.

La entidad balear superó un complejo concurso de acreedores en diciembre de 2011 y, un año después, Jaume Cladera tuvo que dimitir del cargo de presidente poco antes de que un grupo de consejeros, críticos con los máximos responsables de la entidad, le destituyera.

El equipo mallorquinista batió este año todos registros negativos, ya que permaneció tres meses sin ganar un partido, es decir, que entre el triunfo ante el Valencia en Son Moix el 23 de septiembre, hasta derrotar al Betis en el Benito Villamarín el 23 de diciembre, transcurrieron once jornadas.

En enero, con Caparrós en el banquillo,  ya estaba en zona de descenso, en la jornada 19, y no la abandonó ni con el cambio de entrenador, ya que el denominado 'efecto Manzano×', se diluyó como el azúcar.

El Mallorca conquistó una Copa dle Rey y una Supercopa

A una línea defensiva tremendamente vulnerable -es la más goleada del torneo con 72 tantos, se le unieron lesiones de futbolistas que conformaban el espina dorsal del equipo, como el capitán Nunes, el lateral Antonio López, los centrocampistas Javi Márquez y Joao Víctor.

Gio dos Santos no pudo

El equipo anduvo a la deriva muchos meses, y ni siquiera el fichaje 'estrella' del internacional mexicano Giovani Dos Santos pudo frenar un descenso que se ya intuía desde hace varias semanas.

El club balear desafió, incluso, a la FIFA para poder contar en la última jornada con su jugador franquicia, que debía estar concentrado con la selección de México en Houston (Estados Unidos), pero también ese último 'as' en la manga no fue suficiente para evitar la caída.

El Mallorca se aferró a las matemáticas para mantener viva la llama de la esperanza de la permanencia, con el recuerdo, asimismo, de otras temporadas en la que se había salvado de forma dramática en la última jornada.

Pero, esta vez, no fue posible. El 'súper Mallorca' de los técnicos Héctor Cúper, Luis Aragonés, Fernando Vázquez, Michael Laudrup,  y cuya camiseta defendieron, entre otros, el camerunés Samuel Eto'o, Dani Güiza, Diego Tristán, Miguel Nadal, Albert Luque, Juan Carlos Valerón, el uruguayo "Rifle" Pandiani, el argentino 'Caño' Ibagaza y el venezolano Juan Arango, cierra su ciclo más brillante con la pérdida de la categoría.

La entidad balear, en la máxima categoría del fútbol español desde la temporada 97-98, ya se ha puesto manos a la obra para que su tránsito por la Segunda división, sea lo más efímero posible.