Agencias
LIVERPOOL, Inglaterra.- Sergio Agüero salió de la banca en el tramo final y se encargó el domingo de sellar la victoria 2-0 del campeón vigente Manchester City en su visita a Newcastle en el arranque de la Liga Premier inglesa.

David Silva, tras recibir un pase de tacón de Edin Dzeko, abrió la cuenta en el primer tiempo para el equipo dirigido por el técnico chileno Manuel Pellegrini en el St. James' Park.

De acuerdo con The Associated Press, los primeros dos días de la Premier dejaron al frente de la tabla de posiciones a los mismos que que ocuparon las primeras dos plazas en el anterior torneo.

Liverpool, escolta del City por dos puntos la pasada temporada, fue menos convincente frente al visitante Southampton, pero igual se embolsó los tres puntos. El tanto de Daniel Sturridge, a los 79 minutos, sentenció el triunfo 2-1.

Raheem Sterling había adelantado a Liverpool a los 23 minutos, pero Nathaniel Clyne niveló transitoriamente para Southampton a los 56.

A falta del Burnley-Chelsea para completar la primera fecha el lunes, el City es hasta ahora el único equipo que ha ganado por más de un gol.

Manchester City-Newcastle

El City se fue al frente a los 38 minutos con un zurdazo de Silva, definiendo entre las piernas del portero Tim Krul, tras ser habilitado por el bosnio Edin Dzeko.

Como Agüero acabó la Copa Mundial con Argentina mermado físicamente, Pellegrini reservó al delantero argentino para que ingresara a los 82. El "Kun" Agüero inauguró su cuenta goleadora de la temporada al firmar el 2-0 definitivo en los descuentos, al rematar de derecha un rechace previo de Krul.

"Fue fundamental empezar con una victoria", dijo Pellegrini. "Recalcamos con los jugadores que hay que hay que tener hambre (de victorias) y ser humildes. Necesitamos ambas cosas si queremos seguir ganando títulos y mejorar lo que logramos la pasada temporada".

"Reds"-Southampton

En Anfield, Liverpool cantó victoria en su primer partido sin el uruguayo Luis Suárez en la delantera. Sturridge mostró su instinto de goleador al hacer un remate a corta distancia para sellar el triunfo.

Sterling puso en ventaja a los "Reds", pero durante buena parte del partido echaron de menos el dinamismo de Suárez.

"Luis es un gran jugador y lo extrañaremos, pero con todo respeto, ya lo dejamos atrás", dijo Sturridge, quien la temporada anterior fue el segundo mejor anotador de la Premier con 21 goles, por detrás de los 31 de Suárez. "Hemos demostrado que podemos ganar partidos y hacer goles".

Southampton igualó cuando Nathaniel Clyne empalmó un disparo al ángulo del marco y tuvo varias oportunidades de remontar antes de que Sturridge saliera al rescate de Liverpool.

Los visitantes estuvieron cerca de sacar el empate en la recta final. El volante francés Morgan Schneiderlin sacudió la portería al estrellar un disparo en el poste a los 88 minutos y el remate de cabeza de delantero irlandés Shane Long salió apenas desviado.

"Tras el 1-1 pensé que sólo había un equipo en la cancha", dijo el técnico del Southampton, Ronald Koeman. "Pero con la calidad que tiene el Liverpool, no necesitan muchas oportunidades para anotar dos goles".

"Ajustes" después del Mundial

En estas primeras jornadas de la temporada los equipos se dan por bien servidos con ganar de cualquier manera ya que los jugadores están ajustándose a la liga luego del Mundial. Tottenham y Arsenal, candidatos para disputar los primeros lugares, también necesitaron de goles en las postrimerías para ganar el sábado.

"Tuvimos que esforzarnos", dijo el técnico del Liverpool Brendan Rogers, quien dijo que Suárez le envió un mensaje de texto para desearle buena suerte en el arranque de la temporada. "Mientras la campaña avance estaremos mejor".

Cara salida de Suárez

Las semanas pasadas fueron agitadas para el equipo de Anfield, ya que Rodgers aprovechó los ingresos generados por la venta de Luis Suárez al Barcelona por 130 millones de dólares para reforzar la plantilla con miras a la carga extra de partidos que deberán enfrentar por su participación en la Liga de Campeones.

El hueco dejado por la salida de Suárez fue evidente ya que el Liverpool careció de chispa al ataque y Sturridge a menudo lució aislado sin un compañero en la punta. Su gol cayó en una de las pocas oportunidades que tuvo.