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CIUDAD DE MÉXICO.- El abundante cabello de Kayvon Thibodeaux es sujetado con una banda decorada con los colores de la bandera de México. Su mirada se ilumina, el prospecto defensivo más importante del futbol americano colegial en Estados Unidos está orgulloso de pisar la cancha del Estadio Azul del país azteca, de donde provienen sus ancestros.

Sus 1.98 metros de altura y una imponente musculatura no parecen tener parecido alguno con el genotipo mexicano, pero él lo grita con orgullo: por sus venas corre sangre mexicana, publicó el portal MedioTiempo.

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“¡Amo México! Soy parte mexicano y amo México, es mi segunda vez aquí y me encanta”, dice sonriente a Mediotiempo tras ser parte del World Bowl. “Soy parte mexicano porque mi padre tiene familiares mexicanos así que soy mexicano”.

Kayvon es originario de Los Ángeles, California, a más de 3 mil kilómetros del estadio de la Ciudad de los Deportes. Pero se siente como en casa.

Ser elegido por Pro Football Hall Of Fame para disputar este encuentro en la capital mexicana es solo una de las condecoraciones que ha recibido, o mejor dicho, que se ha regalado, pues apenas cumplió 18 años el 15 de diciembre pasado, decidió que era buen momento para firmar con Oregon por encima de otras prestigiosas universidades.

“Me comprometí con Oregon en mi cumpleaños, soy un feliz Pato Verde. Es una gran oportunidad, tuve otras grandes opciones como Alabama, ¿sabes? otros prospectos top, pero pensé en Oregon porque es cerca de mi casa, mi familia puede visitarme fácilmente. Mario Cristobal es un gran tipo, se comprometió a desarrollarme y llevarme al próximo nivel”, explica.

Thibodeaux logró 153 tacleadas, 119 en solitario y 34 compartidas con Oaks Christian High School, y pese a combinar su faceta como defensivo con la de receptor, Oregon lo eligió para jugar en la posición de defensive end, mismo sitio que ocupó en el World Bowl, donde brindó consejos a los siete mexicanos que participaron.

“Fue genial, estuve con chicos más jóvenes enseñándoles a la manera estadounidense y me encantó”, comentó. “Nada puede detenerte, si puedes soñarlo, puedes hacerlo”, agregó sobre su discurso a los más jóvenes.

El es Kayvon Thibodeaux el mejor jugador de High School de los EEUU ahora Pato Verde en Oregon. Ayer nos cautivó luciendo su genuino cabello sujetado con una banda decorada con la bandera mexicana además de su excepcional talento y carisma! Mí mejor📸🏈sin duda😎 #WorldBowlMX pic.twitter.com/35bt0ENkTe

— LluviaGarza (@LluviaGarza2) 23 de diciembre de 2018

Con 54 tacleadas, 18 capturas y cinco balones sueltos forzados, Thibodeaux explotó durante la última temporada. Aunque prefiere ir paso a paso, más allá de que es inevitable comenzar a asociar ya su nombre con la élite de este deporte a nivel profesional.

“¿NFL? Mi sueño es ser mejor, dar un gran impacto en mi comunidad, no tengo nada en México y solo quise ayudar”, insiste. “Planeo, literalmente, hacer historia. Mi meta es hacer historia y convertirme en leyenda”.

A pesar de que sus padres no pudieron acompañarlo al partido por su trabajo, Kayvon los tiene siempre presentes, así como esas raíces mexicanas que no cesa de presumir.

“Hablo un poco español pero no tanto”, bromea. “Mi casa es su casa”, dice en un forzado español. “Que significa mi hogar siempre es de todos”.