EFE
MÉXICO, D.F.- El Cruz Azul envió a la Concacaf una protesta por la sanción de tres partidos impuesta al portero y seleccionado nacional José de Jesús Corona, involucrado en una pelea con jugadores de Xolos de Tijuana al terminar el partido de vuelta de una de las semifinales de la Liga de Campeones regional.

"Enviamos las pruebas donde se ve que (Jesús) no pelea, ni responde a las provocaciones; cuando lo expulsan, da media vuelta y se va al vestuario", dijo hoy el director deportivo del club celeste, Agustín Manso.

Corona, arquero de la selección mexicana que ganó como titular la histórica medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, tuvo un roce con los rivales del Tijuana al concluir el juego en el que los azules eliminaron a Xolos, pero, según Manso, el jugador no respondió ataques, aún cuando el argentino Christian Pellerano lo escupió.

"No creo que Pellerano le haya dicho algo bonito a Corona, lo escupió y es fútbol, es de gente que trabaja en esto y en esas palabras son legales", señaló el directivo.

Consecuencia de la sanción de Concacaf, anoche Corona estuvo ausente en el partido de ida de la final en el que Cruz Azul empató sin goles contra el Toluca y no estaría en el duelo de vuelta que decidirá el cetro, la próxima semana.

'Chuy ha sido ejemplar'

"Estamos extrañados, primero dijeron que lo suspendían un partido y siete días después nos mandan otra cosa, no lo esperábamos. No estamos contentos porque "Chuy" ha sido un ejemplo como persona, ha crecido y no respondió a las provocaciones", dijo.

Corona tiene antecedentes de violencia en el fútbol mexicano y a consecuencia de su participación en un altercado quedó fuera de la Copa Mundial de Sudáfrica 2010, sin embargo, después de eso, ha cambiado su actitud, de acuerdo con los directivos de Cruz Azul.

La sanción al jugador no pone en peligro su participación en la Copa Mundial de Brasil por esa causa; al menos el pasado fin de semana el director deportivo de la selección, Ricardo Peláez, defendió que no respondió las agresiones e incluso salió de la cancha abrazado por un jugador del equipo rival, Fernando Arce.