Milenio Digital
ATLANTA, Georgia.- Fueron latigazos de buen futbol los que dio la selección mexicana contra Paraguay, pero el talento de Damm y un remate de Andrés Guardado les alcanzó para llevarse la victoria 1-0. Eso sí, más allá del marcador, es evidente que al equipo le faltan ajustar detalles, se erraron algunos pases, se perdían algunos balones, pero al final, este tipo de duelos sirven para eso y para que el técnico aclare las dudas que pueda tener.

Es poco el tiempo que tendrá Juan Carlos Osorio para afinar a los suyos antes del primer compromiso en Copa América. Es más, aún no tiene el plantel completo, y eso, aunado al rival lo hicieron modificar su sistema.

Arrancó con tres al fondo, Rafael Márquez, Néstor Araujo y Héctor Moreno. Como carrilero por derecha Jürgen Damm, por izquierda Javier Aquino, ambos sin tanta experiencia en la marca, aunque con buena salida.

Jesús Molina en la contención; adelante Andrés Guardado y Jesús Dueñas. Javier Hernández en punta y atrás Carlos Peña, quien no tuvo un buen partido, solo un potente disparo en el segundo tiempo que encendió a la tribuna, Diego Barreto (quien ingresó para la parte complementaria) apagó el peligro. Además, también una conducción del balón a terreno enemigo que parecía tendría frutos, pues complicó a varios defensores del conjunto guaraní, pero no fue así.

El Tri se notó desarticulado por momentos, si bien el rival también se mostró rocosa atrás, a los pupilos de Osorio les faltaba veneno al frente.

El primer arribo para los mexicanos fue de Damm por derecha, quien forzó después a un tiro de esquina, en el que nada pasó. Aunque instantes después, se dio una jugada de peligro con un remate con la cabeza de Néstor Araujo que se fue ligeramente desviado.

En la respuesta, Paraguay por poco y sorprende con un centro que no alcanzó a contactar con la cabeza Javier Balbuena. El cuadro albirojo le metía intensidad en esos instantes, pero el Tricolor le respondía.

Por momentos, el duelo entraba en un lapo soporífero, que se rompía con uno que otro intento de peligro por parte de ambos cuadros.

De parte del cuadro azteca, Jürgen Damm lo hacía bien al ataque, pero a la defensa, Blas Riveros se lo llevó en un par de ocasiones. Eso sí, en uno de esos choques, Damm se hizo del coraje necesario para recuperar el balón.

Al 32', tras un trazo largo, Damm cedió a Andrés Guardado, y éste quedó de frente al marco para meter el 1-0. México tenía la ventaja, y por instantes parecía que podría ampliarla, pero no era así.

Luego, entraron Oribe Peralta en lugar de Javier Hernández, Paul Aguilar por Andrés Guardado y Yasser Corona sustituyó a Héctor Moreno. También ingresaron Diego Reyes y Jorge Torres Nilo.

El partido no daba para más, pese a que por instantes se notaba mucha bravura por parte de ambos cuadros para pelear el esférico.

Al final, México se quedó con la victoria.