Construyó Moncayo rostro cultural que identifica a México

Consideran que el compositor es un personaje necesario, que no puede faltar en el mausoleo de la Rotonda de las Personas Ilustres.

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Bailarines de la Compañía Nacional de Danza durante la pieza coreográfica que forma parte del programa Cien años con Moncayo, homenaje que se realizó hace unos meses a José Pablo Moncayo. (Archivo Notimex)
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Agencias
MORELIA, Michoacán.-  El traslado de José Pablo Moncayo (1912-1958) a la Rotonda de las Personas Ilustres es un acto justo, porque se trata de uno de los constructores de la imagen del nacionalismo mexicano y del rostro cultural que nos identifica en el mundo a partir de la segunda mitad del Siglo XX, consideró Gerardo Sánchez Lara.

El director de Extensión Académica del Conservatorio de las Rosas, institución de prestigio internacional asentada en esta ciudad, estimó que Moncayo es un personaje necesario, que no puede faltar en ese mausoleo, porque para un amplio sector de la sociedad el "Huapango", su obra emblemática, "es el segundo Himno Nacional".

"Esa obra lleva, desde hace medio siglo o más, el apellido del autor, porque todo aquel quien la conoce la identifica como El Huapango de Moncayo. Es una obra muy popular que, ciertamente, me parece un retrato bastante bello de esta nación. Qué bueno que a México se le identifique de esa manera dentro y fuera del país", añadió el maestro.

Consideró que "el de los homenajes, los reconocimientos y las placas, es un proceso dentro de los rituales urbanos históricos que vale la pena, por la justicia que se hace a ese gran compositor jalisciense".

Recordó que este año se cumplieron 100 del nacimiento de Moncayo. "Se celebró ampliamente a través de conciertos y programas diseñados por varias instituciones, así como por las orquestas más importantes del país y más allá de nuestras fronteras. La Rotonda es heterogénea para nuestra cultura y ahí faltaba Moncayo, junto al popular Agustín Lara", añadió.

Entrevistado por Notimex en su oficina dentro del Conservatorio, Sánchez Lara exclamó: "Qué bueno que no termine el año sin que este traslado se lleve a cabo dentro de los festejos!", aunque reconoció, sin embargo, que "no creo que afectara demasiado si eso no sucediera".

 Este año se cumplieron 100 del nacimiento de José Pablo Moncayo.

Abundó que a José Pablo Moncayo, felizmente se le tiene más en la memoria y en el gusto colectivo del país, desde hace muchos años, "porque su música está y estará más presente en la memoria, el gusto y el corazón de los mexicanos, que el hecho que sus restos estén en un panteón como la Rotonda, o no".

Con ésto, abundó en sus declaraciones, Moncayo ha logrado conquistar un espacio en el presente de la música y del país, "pero en nuestro rostro nacional y nuestra identidad, lo conquistó desde hace bastantes años porque además de su Huapango, tocaba piano y algunos instrumentos de viento, y heredó para la posteridad muchas otras obras más".

Finalmente, el director de Extensión Académica del Conservatorio de las Rosas destacó que en esa institución se montó este año, en el marco del Festival Internacional Arte Joven, "La Mulata de Córdova", ópera vestida con una orquestación privilegiada en la que la música de José Pablo Moncayo tiene un papel determinante para su éxito.

José Pablo Moncayo García nació en Guadalajara, Jalisco, y cursó estudios en el Conservatorio Nacional. En 1942, con una beca del Instituto Berkshire, realizó estudios con Aaron Copland, compositor y director de orquesta estadounidense. Entre sus contemporáneos y compañeros están Blas Galindo, Salvador Contreras y Daniel Ayala, también destacados músicos.

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