Agencias
NUEVA YORK, EU.- Después de admitir que realizó comentarios racistas, la cocinera estadounidense Paula Deen perdió el apoyo de nueve empresas del país que dejarán de vender sus productos, mientras que las ventas de sus libros en Amazon se disparan, señalaron este viernes medios locales.

La gurú de la cocina sureña de Estados Unidos, de 66 años, fue denunciada la semana pasada por un antiguo empleado por haber realizado comentarios racistas, y el pasado viernes fue despedida del programa de televisión "Food Network", donde tenía una sección con una audiencia del 15 por ciento en el último año.

J.C Penny y Sears se sumaron a las siete empresas que ya habían decidido no vender sus productos, entre ellas cadenas minoristas tan importantes como Walmart, para mostrar su repulsa a la actitud racista de la cocinera.

"Después de cuidadosas consideraciones y de toda la información que tenemos disponible, hemos decidido retirar todos los productos vinculados a su marca", dijeron en un comunicado desde Sears que reprodujo NBC, aunque aseguraron que continuarán "evaluando la situación".

En una entrevista en el "Today Show" emitida ayer, Deen rompió a llorar y afirmó: "No soy racista".

Pero además de reacciones de rechazo, Deen ha recibido el apoyo de personalidades como la escritora Anne Rice y las cifras de ventas de sus libros de cocina en Amazon se han disparado.

Su libro "El nuevo testamento de Paula Deen" se ha colocado en el número uno de la página de venta on line solo con las peticiones de preventa, pues todavía no se ha publicado, seguido de otro de sus títulos, "La Biblia de la cocina del sur de Paula Deen".

Deen, conocida por promover entre el gran público recetas de alto contenido calórico como hamburguesas entre "dónuts", ya había sido objeto de una gran controversia el año pasado, cuando desveló que padecía diabetes tres años después de que se la diagnosticasen. 

El escándalo comenzó cuando Lisa Jackson, una exgerente de uno de sus restaurantes, demandó a Deen y a su hermano por racismo y acoso.

La demandada dice que cuando estaban discutiendo por el trabajo de una boda Deen dijo que quería "un estilo sureño de plantación en la boda".

Entonces, para más añadió, "aunque lo que de verdad quiero es un montón de negratas llevando camisas de esclavo, pantalones negros y pajaritas; ya sabes, al estilo de Shirley Temple cuando solían bailar claqué por ahí"

(Con información de EFE, europapress.es y elnuevodia.com)