Iván Castañeda/Milenio
MÉXICO, D.F.- En su primera visita a nuestro país, Hugh Laurie decidió dejar la bata de Dr. House que lo caracterizó durante años, para dar una receta musical a 6 mil 800 personas, según organizadores, que se dieron cita en el Auditorio Nacional.

El cantante inglés, ataviado con un elegante traje y una camisa verde, cautivó a los asistentes con blues, jazz, soul, tango y rock que fueron ejecutados con la ayuda de su grupo multinstrumentalista The Copper Bottom Band.

“Buenas noches México, ¿cómo están? Yo estoy muy contento de estar aquí. Muchas gracias por venir”, dijo en español Laurie, quien se emocionó al ver cómo la multitud lo ovacionaba.

Inmediatamente después, el músico, con un vaso tequilero en mano, se sinceró con su público, pues confesó que se le habían acabado las palabras que aprendió en castellano y por ello tenía que hablar en inglés.

Laurie, en todo momento alegre y amable, dejó claro que el mal genio del médico que lo hizo popular en la televisión solo era parte del personaje, ya que constantemente hacia bromas con el respetable y respondía todos los “te amo”, que le gritaban las mujeres.

Hugh, la mayor parte del tiempo, se montó en su gran piano donde interpretó canciones como Iko Iko, Let the Good Time Roll, Evenin, Bona Sera y What Kind of Man Are You.

La velada, que se tornó íntima, también tuvo colaboraciones especiales como la que ocurrió con Gaby Moreno en Kiss on Fire, y con un grupo de cantantes en Lazy River. También Sister Jean McClein unió su voz con el intérprete en varias ocasiones como en Didn’t it Rain.

En una de las múltiples intervenciones, Laurie decidió brindar con los presentes con un vaso de whisky y también aprovechó la oportunidad para desearle suerte a los mexicanos en el Mundial de Brasil, que arrancará mañana.

De igual manera, al terminar de entonar melodías como My Journey to the Sky, agradeció las muestras de cariño y las felicitaciones que le hacían por su cumpleaños, que celebrará hoy en nuestro país con otro concierto en Guadalajara.

La noche de buena música continuó con tributos a canciones como Wild Honey, I Wish I Knew How It Would Feel, Such a Night y Green Green Rocky Road, que eran ejecutadas magistralmente por los músicos que nunca se cansaron de tocar.

Con Changes y You Never Call Tell clausuró su presentación, que duró alrededor de dos horas.    

¡Qué buena medicina!

• Hugh Laurie declaró que fue un riesgo dejar la actuación por la música, pero su pasión por ella le hizo ofrecer conciertos.
• Durante su gira, el cantante ha visitado diversos países como Suiza, Canadá, Australia y Estados Unidos, entre otros.