Jesús Mejía/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Para Juan Carlos Lomónaco, director de la Orquesta Sinfónica de Yucatán (OSY), la agrupación ha alcanzado, a 10 años de su formación, una calidad artística con gran nivel de competitividad, con una estructura y organización que le permite, dijo, no estar a expensas de los cambios sexenales.

Seleccionado en 2009 mediante los votos de los propios músicos de la Sinfónica de Yucatán, el patronato y el Gobierno, Lomónaco está al frente de la orquesta desde hace cinco años y batalla para que los yucatecos la hagan suya y se enorgullezcan de ella.

A 10 años de su fundación, ¿cuál es la situación de la OSY?

Se ha convertido en poco tiempo en una de las mejores orquestas del país, a diferencia de otras que son más añejas como la Sinfónica de Xalapa, la Filarmónica de la UNAM y la Sinfónica Nacional, que llevan más de 50 años. Sin duda, la de Yucatán es la más joven de México y ya es de las más reconocidas.

¿Qué factores colocan a la OSY en primer nivel?

La calidad de los músicos, que suman 63 en la actualidad, mismos que fueron seleccionados y que son de un nivel artístico elevado. 

Esperamos contratar más para las secciones de cuerda y madera y alcanzar los 70, lo que dependerá de los recursos económicos.

Se dice que en la orquesta no hay músicos yucatecos.

Es un tema controvertido y mal entendido. Sí hay yucatecos. La estadística marca 50 por ciento mexicanos y 50 por ciento extranjeros. Cuando se creó la orquesta en 2004 fue necesario traer extranjeros, porque en ese entonces en Yucatán no había músicos de alto nivel para crear la OSY.

Pero ahora ya hay músicos capaces…

Todos deseamos ver más músicos yucatecos. Tengamos paciencia.

La Filarmónica de Viena necesitó 400 años para tener su plantilla actual. No hay que cortarse las venas por eso. En una orquesta de excelencia debe haber músicos capacitados y no podemos dar el paso automático sólo por ser yucateco.

¿Qué importancia tiene el público para la OSY?

Es generoso y de sensibilidad muy notoria, un importante factor del desarrollo de la orquesta. La meta es ir creciendo con la gente, llenar el teatro Peón Contreras con obras de Anton Bruckner o la Consagración de la Primavera de Stravinsky.

¿Cuál es la diferencia de la OSY con otras orquestas?

El Fideicomiso Garante de la OSY, que nos permite allegar de recursos propios y contar con aportaciones. Aquí el Gobierno aporta el 60 por ciento de los recursos y el resto el patronato y la taquilla. En otras orquestas, como la Sinfónica Nacional y la Ofunam, dependen completamente de la institución a la que pertenecen.

¿Qué otras ventajas ofrece el fideicomiso? 

Que la OSY tiene la posibilidad de contar con aportaciones privadas, lo que le permite dar continuidad y tener autonomía, y en este caso una administración propia, muy eficiente gracias a Miguel Escobedo Novelo. 

En otras orquestas, el director se involucra con la administración. Si yo lo hiciera probablemente fracasaría, ja, ja, ja.