Escuela de Laudería del INBA quiere ser única a nivel mundial

A menos de 30 años de existencia se trabaja en un proyecto ambicioso para el 2015, que conjuntaría la enseñanza con la investigación.

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La Escuela de Laudería tuvo su origen hace 50 años. (aquiesqueretaro.com)
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Agencias
MÉXICO, D.F.- Única en su tipo en Latinoamérica, la Escuela de Laudería del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), que prepara a sus alumnos para terminar un violín en tres o cuatro semanas, pretende dar un salto más para destacarse a nivel mundial.

De acuerdo con Notimex, el director de la Escuela de Laudería, Luis Gilberto Lavalle Guillén, indicó que a menos de 30 años de existencia se trabaja en un proyecto ambicioso para el 2015, que conjuntaría la enseñanza con la investigación.

Cristian Reyes vivió ocho años en Estados Unidos, donde conoció esta escuela, que destaca a nivel internacional, a través de un laudero y decidió regresar a México a estudiar la carrera.

"Junta la música, las artes plásticas, la historia. Me costó trabajo entrar por la edad, tengo 29 años, pero ampliaron la edad de ingreso a 45 años; la escuela de allá era muy cara y acá tiene un nivel mayor, así que regresé", narró.

La Escuela de Laudería tuvo su origen hace 50 años, cuando el laudero italiano Luigi Lanaro promovió el primer bosquejo de la Escuela Nacional de Laudería en 1954, pero el proyecto se abandonó durante casi dos décadas.

Al término de la licenciatura los alumnos deben ser capaces de terminar un violín en 120 horas

Después, el gobierno mexicano invita al laudero francés Luthfi Becker a impartir cursos de capacitación a jóvenes en la reparación de instrumentos de cuerda y ante el interés, el INBA estableció una licenciatura en 1987.

Entonces, se empieza con la construcción del violín y otros instrumentos antiguos, aunque las primeras generaciones eran de tres o cuatro alumnos en la ciudad de México y en 1992 se hace una convocatoria para descentralizar las dependencias.

Ese mismo año, el estado de Querétaro obtiene la sede de la escuela que se instala en el edificio conocido como La Casa del Faldón, para luego ubicarse en la calle de Morelos y en 2005 se ubica en la calle de Hidalgo.

"Se trata de una escuela muy joven, tiene 25 años a partir de su fundación en 1987, pero es reconocida por su programa académico como única en su género en Latinoamérica", subrayó su director.

En otros países se forman lauderos a un nivel técnico, mientras que el INBA ofrece una licenciatura de 5 años, que los alumnos cursan a tiempo completo, con materias prácticas y teóricas.

Los alumnos tienen materias como solfeo e historia de la música, hasta ciencia, con matemáticas, física, acústica y anatomía de la madera, porque es el principal material para elaborar los instrumentos.

"Durante seis semestres conocen toda la anatomía de la madera, desde que el árbol crece y reciben clases de un idioma extranjero, historia del arte, dibujo, fotografía, documentación y catalogación de instrumentos", detalló.

Al término de su preparación académica, los alumnos deben tener listos siete instrumentos, de los que cuatro son violines, dos violas y un violonchelo, mediante un plan de tallado semestral.

Con esta preparación, al término de la licenciatura los alumnos deben ser capaces de terminar un violín en 120 horas, unas tres o cuatro semanas de trabajo.

El campo laboral de los lauderos es alentador. Desde trabajar con un laudero profesional, montar su propio taller de restauración o construcción, hacer estancias internacionales o una orquesta, hasta museos e investigación de instrumentos.

"Tenemos gente en Italia, en Nueva York, en Miami, que gana concursos internacionales, la escuela tiene bastante reconocimiento a nivel internacional y la gente la conoce, en Estados Unidos y en Europa", destacó el director.

Actualmente la Escuela de Laudería recibe entre 20 y 30 solicitudes de ingreso al año, pero no puede aceptar más de seis u ocho alumnos, debido a que la atención es personalizada.

Ante lo limitado del espacio, la Escuela de Laudería confía en un proyecto del gobierno estatal que donará un terreno cercano al anillo vial Fray Junípero Serra, en el kilómetro 2 del circuito Universidades, para construir un edificio propio.

"El gobierno del estado, la Secretaría de Educación Pública y el INBA ya tienen el terreno, pero la inversión es de 70 millones de pesos. Se pretende que esta escuela sea a nivel mundial, como ninguna otra", expresó Lavalle Guillén.

En esta escuela, que podría estar lista en el año 2015, se pretende mantener la licenciatura, promover estancias de lauderos de todas partes del mundo y hacer investigación constante.

"Ya están los avances en el proyecto ejecutivo, falta la aportación federal con la estatal, para ver cómo nos podemos coordinar", puntualizó el director de la Escuela de Laudería.

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