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ESTADOS UNIDOS.- La modelo y ex conejita de Playboy Kendra Wilkinson está atravesando por un doloroso proceso de divorcio, después de haber estado casada hace 10 años con el jugador de la NFL, Hank Baskett, con quien tuvo una boda de ensueño en 2009 al interior de la Mansión de Playboy.

En meses anteriores, la también actriz había comentado en sus redes sociales que ya tenía ciertos problemas en su matrimonio, los cuales no habían podido resolverse, es por eso que para ella, pedir el divorcio a su esposo fue el último pero único recurso que encontró.

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A través de Stories de Instagram, ella reveló su sentir en esta tan triste etapa de su vida. “10 años, hice todo lo que pude, no fue suficiente. Siempre lo amaré y mi corazón sigue abierto para él. Creía en ‘para siempre’ de verdad lo creía pero al parecer no está destinado a ser. Estoy muy asustada pero tengo que ser fuerte por mis hijos. Lo seré”, dice Wilkinson.

“Gracias a todos mis amigos y familia por apoyarme en este momento, todo el amor ayuda, gracias. Nunca pensé en ver llegar este día”, agregó, luego de compartir una de sus conocidas e icónicas fotos de boda en la que aparece con Hank Baskett al exterior de la Mansión de Playboy y con la leyenda: “Yo creía”.

Una fuente cercana a E! News contó algunos de los motivos de esta separación: “Kendra y Hank han tenido problemas durante años, pero las cosas han estado en su punto más bajo recientemente. Kendra quiere abandonar el matrimonio y está planeando solicitar el divorcio pronto. Ella quiere asegurarse de que está tomando la decisión correcta para su familia, pero realmente ha llegado a un punto crítico. Hank y ella han tenido muchos argumentos últimamente y no han podido comprometer sus desacuerdos”, se reveló.

Kendra y Hank tienen 2 hijos en común, Hank IV de 8 años de edad y Alijah de 3 años de edad.

Con información del portal E!