Jesús Mejía/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- Con una expresión renovada del tango, tanto en lo musical como en la pasión desbordante del baile, Mérida dio la bienvenida a la ópera “María de Buenos Aires”, del compositor argentino Astor Piazzola.

La obra recibió la aclamación del público en la primera de sus tres presentaciones programadas.

Con un aforo lleno, el patio del Centro Cultural Olimpo albergó el estreno de la Operita Tango, bajo la dirección de Eugenio Guerrero, quien representó con fidelidad la obra del controvertido compositor Piazzola –para muchos un transgresor del tango- y mostró la vitalidad del género.

Al ritmo que marca el infaltable bandoneón, los actores-cantantes y un grupo de bailarines desarrollaron la historia de una mujer, María, víctima de su condición social y económica, que ingresa a los arrabales porteños y se convierte en prostituta para sobrevivir.

Al ambiente de un arrabal de mesas, sillas, copas y barajas se sumó el público meridano, que presenció el continuo diálogo de la orquesta, las parejas de baile, el amor y la pasión desbordante de cada una de ellas, mientras María, protagonizada por Brenda Sícara, deseada por los hombres, cantó su suerte.

Yo soy María de Buenos Aires/ si en este barrio la gente pregunta quién soy/ pronto bien lo sabrán/ las hembras que me envidiarán/ y cada macho, a mis pies/ como un ratón en mi trampa ha de cae...

Esa fue una de las estrofas de la milonga que la arrabalera cantó al ritmo de la orquesta dirigida por Rusell Montañez.

Fueron los ladrones y regentes de prostíbulo los que llevaron a María a una obscura muerte. Luego del deceso, la sombra de la protagonista es condenada a deambular por las calles de la capital de Argentina para dar a luz a una niña que resulta ser ella misma. 

Más funciones

• La ópera-tango será representada el jueves y el sábado próximo en el Centro Cultural Olimpo a las 20:00 horas. La entrada es libre.
• Es ofrecida por el Ayuntamiento de Mérida y por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes.