Milenio
MÉXICO, D.F.- Madonna asistió la semana pasada al Festival de Cine de Nueva York, donde acudió al estreno del filme "12 años de esclavitud", pero durante la proyección de la película se dedicó a enviar mensajes de texto por su celular, acción que molestó a los asistentes.

Cuando los empleados le pidieron que lo dejara de hacer, la cantante se defendió diciendo que eran unos "esclavizadores" y justificó el uso de su teléfono por motivos de "negocios".

Tim League, dueño de la empresa Alamo Drafthouse, prohibió a Madonna la entrada a sus salas en cualquiera de los complejos que tiene en Estados Unidos.

"Hasta que no emita una disculpa pública a todos los que asistieron al festival, Madonna no podrá entrar en ninguna de las salas Drafthouse", escribió League.

El empresario comentó después a los medios que "en principio, hasta yo mismo me tomé a broma la situación y lo que tuiteé no fue más que el resultado de un momento de diversión".

"Pero teniendo en cuenta lo mal que ha sentado su ofensa a los fanáticos del cine", señala, "hemos decidido que continuaremos con la prohibición hasta que demuestre un poco de humildad ante el mundo".

El dueño de las salas de exhibición cinematográfica informó al portal Entertainment Weekly: "Sé que no le va a cambiar la vida el hecho de no poder ir al cine, pero debe aprender que es de mala educación usar el móvil mientras se ve una película".