Agencias.
NUEVA YORK, Estados Unidos.- Los actores se someten a transformaciones físicas para sus papeles, eso es bien conocido, aunque en el caso de Sharon Stone verla oscura, seria y desgarbada, casi irreconocible en "Lovelace", es algo que francamente nadie se espera.

Amanda Seyfried, quien interpreta a la hija de Stone, la estrella de "Garganta Profunda" Linda Lovelace, dijo que en la producción "nadie se dio cuenta que era ella".

"Harvey Weinstein, si mi memoria no me falla, no sabía que Sharon Stone estaba en la película, ella es así de buena", dijo Seyfried a la agencia AP.

Pero Stone refiere que también tuvo que transformarse para interpretar su papel súper sensual en "Bajos instintos", en 1992.

"Es gracioso, porque cuando interpreté "Bajos instintos" todos pensaban que estaba interpretando algo más parecido a mí misma", explicó Stone, "pero en realidad me transformé totalmente para interpretar ese personaje, no sabía cómo actuar para verme así".

En aquella ocasión, agregó la impactante rubia que cruzó las piernas de una memorable manera ante Michael Douglas, "fue más divertido seguir viéndome glamurosa y cercana a ese papel, y obviamente no voy a salir viéndome parecida a este personaje, Dorothy Boreman, ¡porque no quiero! Pero no soy completamente como ese personaje ('Bajos instintos') ni tampoco como éste".

Stone sigue cuidando mucho su imagen, y aunque diga que no, a sus 55 años se ve muy elegante, pero acepta con ecuanimidad el inevitable envejecimiento y los diferentes papeles que esto conlleva.

"Soy una señora mayor", dijo. "Estoy segura de que voy a interpretar papeles de adultos, madres y al final de cuentas abuelas. ¡Estoy segura de que me he olvidado con gracia de las cosas de la juventud!"

Le gustan las reacciones

A Sharon Stone le gustan mucho las reacciones que se desencadenan cuando la gente nota que detrás de la figura desgarbada está la eterna seductora de "Bajos Instintos".

Sobre su sórdido personaje en "Lovelace" comentó que le gusta verse así porque "siento como que ¡lo logré!, ¡De veras lo logré!".

Dentro y fuera de pantalla, incluso con sus comentarios controvertidos en alfombras rojas, Sharon Stone siempre ha sorprendido a sus espectadores.

Cuando ganó un Globo de Oro por "Casino" de Martin Scorsese, superando a estrellas como Meryl Streep, Susan Sarandon y Emma Thompson, aunque también, hay que recordar, fue nominada al Oscar por su interpretación de una prostituta cara, Stone deslumbró  a la crítica, y los comentarios fueron igualmente de asombro.

Sus películas más recientes no han tenido tanto éxito, pero sigue siendo una figura de Hollywood que recauda fondos para la investigación del SIDA.

Amanda va tras la 'piedra' de Stone

Su compañera de reparto en "Lovelace", Amanda Seyfried, no para en elogios para Stone por su papel como mentora en el plató.

La joven protagonista confesó que deseaba "hacerlo muy bien para ella", dijo, "me moría de miedo de pensar que haría mi trabajo mal. Pero... ella dijo lo correcto, me ayudó y me metió de golpe en el papel".

En la película Seyfried recibe bofetadas de su "madre" en la película. Otra escena es aún más dura: la madre de Lovelace le niega que regrese a casa para refugiarse de un esposo que la maltrata físicamente.

Stone, quien en la vida real es madre soltera de tres hijos, dijo que se enfocó en las intenciones de su personaje, no en sus acciones.

"Creo que mi personaje pensó que estaba siendo una buena madre al hacer que su hija cumpliera sus compromisos", dijo.

Reflexionando sobre su papel, Stone considera: "creo que en ese entonces y desde su punto de vista ético (de la madre de Lovelace), sentía que mantener su compromiso como esposa, crecer y mantenerse en un matrimonio maduro... le estaba dando a su hija un buen ejemplo. Eran otros tiempos".

Este papel, dijo Sharon Stone, "se apropió de su vida y se convirtió en algo más". "Creo que la lección es que no se trata de no caer, sino de saber levantarse", señala.

La realidad desnuda de 'Lovelace'

La película "Lovelace" está basada en el libro de memorias "Ordeal" de 1980, donde la actriz porno, que renunció eventualmente a su carrera en el cine para adultos y se convirtió en una activista contra la pornografía, cuenta su vida.

Lovelace murió en 2002. En la cinta se muestra su oscura historia al lado de su marido, Chuck Traynor, quien la obligó a filmar "Garganta Profunda", responsable de su prostitución.

Sobre la película pronta a estrenar este viernes, Stone agregó que tras todo ese infierno Lovelace dejó a Traynor, se casó otra vez y tuvo hijos.