Una Navidad sin rencor para Laura Zapata

La actriz pasará las fiestas rodeada de sus hijos, su abuela Eva Mange y de mucha gente que la quiere.

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Laura Zapata es buena anfitriona en Navidad. (Agencia Reforma)
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Manuel Tejeda/Agencia Reforma
MÉXICO, DF.- Esta Navidad, Laura Zapata convivirá con sus hijos, Claudio y Patricio; con su abuela, Eva Mange, y el resto de sus familiares... al menos, aquellos que la quieren y le han brindado su amistad a lo largo de la vida.

"Será una Navidad muy linda esta, muy diferente. Estamos en el mundo de las transformaciones, no somos los mismos que nos levantamos ni los mismos cuando nos acostamos.

"Estaré con mis hijos, que son muy sanos e inteligentes; con mi abuela, que en enero cumple 95 años, y con amigos que no tienen dónde pasarla. Hay muchos que me quieren, hermanos y hermanas de la vida, amigas de toda la vida, desde que soy niña, y comadres", expresó la actriz, en el estudio de su hogar.

Rodeada por diplomas, reconocimientos, premios y libros, Zapata aseguró que siempre le ha gustado ser una buena anfitriona y deleitar a sus invitados con platillos que ella prepara.

"A mí siempre me ha gustado organizar y cocinar. Hago unos pavos muy ricos, pero aún no sabemos si haremos el tradicional, relleno de almendras o piñones, o uno relleno de queso gruyere. También hago una pierna muy rica, que le gusta a mi familia, pero no sé si hacerla enchilada o dulce.

"Yo creo que si no tuviera que trabajar para vivir, o si hubiera durado mi matrimonio, hubiera sido realmente una ama de casa espectacular, porque me encanta el hogar", aseguró.

De estas fechas, la artista, quien acaba de terminar la temporada de la obra El Efecto de los Rayos Gamma, atesora muchos recuerdos, como cuando viajaba a Veracruz o a La Paz, Baja California, para convivir con los familiares de la señora Mange, quien la crió en su juventud.

 

No todo es felicidad

Sin embargo, no todo ha sido felicidad, ya que una de las cosas que le causan dolor es saberse huérfana, al perder, primero, a Guillermo Zapata Pérez de Utrera, su padre, y luego a Yolanda Miranda Mange, su madre, en el 2011.

"Siempre se añorará a los que se han ido. Cuando eres un ser humano que has perdido a tu madre y padre te sientes huérfano, pues te gustaría tenerlos por siempre. Los añoras, pero en algún momento los encontrarás si tienes algo de fe.

"La orfandad es dolorosa. Afortunadamente, tengo a mi abuela, que ha hecho las veces de mi madre, porque estoy con ella desde los 3 años de edad. Siempre pienso en mi mamá y en mi papá cuando estaban en este plano. Pero así es la vida, hay que gozar a los que están", dijo.

En esta época, caracterizada por el perdón, Zapata aseguró que no tiene a nadie a quien perdonar, ni siquiera a sus hermanas, luego de estar envueltas este año en una controversia por no visitar a su abuela cuando esta se fracturó la cadera, aparentemente no darle dinero para su manutención o, lo más reciente, que Ernestina Sodi afirmara que Patricio sería hijo del cantante Emmanuel.

"Solamente perdonan Dios y las personas que tienen rencor, porque cuando tú odias es cuando perdonas. A las personas que me han hecho daño, este año, solamente las veo de lejos. Todos los seres humanos nos sentamos en una silla y vemos una danza de conciencias, de espíritus, y nada es personal.

"Tendría que estar, como dicen ellas, drogada (para reconciliarme). Esto es una fractura definitiva, me han faltado el respeto y tienen todo el patrimonio de mi abuela en su poder. Yo creo que tanto odio se origina por la forma en cómo las educaron", sentenció.

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