Mérida.- Alrededor de 45 de los 106 alcaldes de Yucatán, enfrentan quejas, acusaciones y hasta denuncias ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos en Yucatán (CODHEY), por prohibir el libre tránsito, por disposiciones de "toque de queda" y violaciones a las garantías individuales sopretexto de la contingencia sanitaria por el Covid-19.

Incluso están los casos de Muna, en donde el mismo alcalde Rubén Carrillo reportó que había una persona amenazando con quemar la vivienda de algún infectado de Covid-19, y los de Dzemul que construyeron un muro en plena carretera para que no puedan acceder al municipio.

También los casos de Ticul que amenazaron con arresto a quienes repartieran juguetes en el "Día del niño", el de Umán, Freddy Ruz Guzmán quien también amenazó con detención policiaca a quien saliera de su municipio después de las 10 de la noche.

El último caso fue el alcalde de Progreso, Julián Zacarías Curi, quien determinó desde el lunes pasado "toque de queda" a partir de las 7 de la noche.

La mayoría de las denuncias interpuestas (15 aproximadamente) ante la (CODHEY), son por violación al libre tránsito.

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La misma institución también reveló el caso de dos estadounidenses que viven desde hace 15 años en el municipio costero de San Crisanto y viajaron por el deceso de un familiar en Estados Unidos y al regresar no se les permitió entrar de nuevo al municipio.

Hay otras quejas también contra ediles de Conkal, Cenotillo, Peto, Kinchil y Hunucmá entre otros.

La mayoría de los ediles argumentan que han tenido que "endurecer" posturas porque la gente no está acatando quedarse en casa y esto aumenta el riesgo de contagios del coronavirus, en un mes de mayo, en el que se presume deberán incrementarse los niveles de contagio y afectación de este virus.

En Muna, el alcalde Rubén Carrillo reportó que la persona que amenazó con quemar la casa de algún contagiado de Covid-19 ya fue detenido.