Agencias
CHILPANCINGO, Guerrero.- La Sala Unitaria del Tribunal Electoral del Estado de Guerrero invalidó la elección del Ayuntamiento de Tixtla y le revocó la constancia de mayoría al priista Saúl Nava Astudillo como presidente municipal, quien ya había sido declarado alcalde electo.

Asimismo la planilla de síndicos y regidores también fue cancelada.

El argumento es que no se permitió la instalación de casillas hasta 40 por ciento de los lugares indicados, debido a que integrantes de la Normal Rural de Ayotzinapa e integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero (Ceteg) no permitieron su instalación y, en muchos casos, quemaron la papelería electoral en las calles. Se robaron un total de 24 casillas en el municipio.

Ramón Ramos Piedra, magistrado del Tribunal Estatal Electoral, señaló que se realizaron tres impugnaciones  en esta elección por parte del  PRD, PT y Morena. Indicó que será el Congreso del estado quien designe a las autoridades interinas en Tixtla.

El Congreso de Guerrero debe de ser notificado del hecho y, posteriormente, se tendrá que emitir una convocatoria para realizar una nueva elección en Tixtla por parte del Instituto Electoral de Participación Ciudadana .

Para esto se debe arrancar desde el principio. Primero, conseguir un presupuesto especial para llevar a cabo la elección, insacular a las personas que serán funcionarios, imprimir la papelería electoral y capacitar a las personas que van a participar.

El lunes pasado, previendo que se fuera a cancelar la elección, simpatizantes del priista Saúl Nava Estudillo realizaron una manifestación en las instalaciones del Tribunal Estatal Electoral, exigiendo que se respetara el voto.

Durante los últimos meses, familiares de los normalistas desaparecidos y maestros de la Ceteg habían anunciado que no permitirían efectuar los comicios en Guerrero, boicoteando el proceso, hasta que aparecieran los 43 estudiantes.

El grupo de inconformes, realizó diferentes acciones, como quitar la propaganda electoral de las calles, pedir a la gente que no saliera a votar, etcétera. A pesar del intento de boicot, en  80 municipios de Guerrero se llevó a cabo el proceso electoral sin mayores incidentes.

Quema de urnas

En 80 municipios de Guerrero se pudo llevar a cabo la elección de gobernador y la renovación de ayuntamientos y el Congreso local.

Sólo en Tixtla, donde se encuentra asentada la Normal Rural de Ayotzinapa hubo incidentes. En septiembre pasado, al menos 43 estudiantes de esa escuela desaparecieron al ser atacados por policías municipales de Iguala y Cocula, en connivencia con el crimen organizado.

Los maestros de la CETEG y normalistas impidieron la instalación de urnas, robándose el material de 24 casillas, mismo que quemaron en calles de ese municipio. Esto, finalmente, motivó la cancelación de la elección en Tixtla.