Agencias
MÉXICO, D.F.- Muchas historias de amor suelen tener finales felices, y otras un tanto desafortunadas. Pero el caso de Luis Enrique Valles Celis y su pareja tuvo un final trágico: él la asesinó, mutiló y quemó su cuerpo para luego abandonar sus restos en tres delegaciones distintas de la Ciudad de México. 

Según un comunicado de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, Luis Enrique y su novia habían acordado verse el 1 de mayo de 2013, en calles de la colonia Valle de las Luces, en Iztapalapa.

Ella le avisó a uno de sus familiares que vería a Luis Enrique, según cita Milenio.

Desde ese 1 de mayo, la mujer desapareció. Presuntamente su novio la había matado. La destazó y quemó los pedazos. Después abandonó las partes en tres delegaciones de la ciudad de México.

Luis Enrique dejó los primeros restos humanos de su novia en una zona boscosa de la Miguel Hidalgo; otros en calle Laboratoristas, colonia Sifón, en Iztapalapa, y los restantes en Canal Nacional, colonia CTM Culhuacán, de Coyoacán.

El hombre se había deshecho del cadáver de su pareja sentimental, hasta que los restos humanos fueron encontrados. Al lugar llegaron miembros de la PGJDF para confirmar el hallazgo y realizar las labores correspondientes.

Escondido con la familia

A partir de las investigaciones ministeriales, periciales y de los detectives, lograron la identificación de la víctima. Las pruebas indicaban que Luis Enrique era el presunto responsable.

Los agentes lo localizaron en una casa donde se ocultaba. En su mayoría se escondía en domicilios de familiares y amigos; aun así fue capturado.

Bajo la causa penal 36/2014, el Juez 52 Penal, con sede en el Reclusorio Preventivo Oriente, determinó que este sujeto llevará juicio ordinario.

La Procuraduría capitalina fue notificada del auto de plazo constitucional dictado contra Luis Enrique.