Agencias
MÉXICO, D.F-  Un cuarto policía de la ciudad de México fue detenido para ser investigado por su presunta participación en el secuestro de 12 jóvenes de un bar de la capital, en mayo, cuyos restos fueron hallados varias semanas después en una fosa clandestina, reveló este martes el secretario de Seguridad Pública capitalino.

El secretario Jesús Rodríguez Almeida dijo a The Associated Press que los cuatro fueron entregados a la Procuraduría capitalina para que sean investigados, aunque señaló que aún no hay elementos para concluir si participaron o no en el plagio de los jóvenes, en un caso que ha sacudido a la ciudad de México.

"Nosotros no prejuzgamos si son o no culpables en este momento", dijo Rodríguez, el jefe de la policía de la ciudad integrada por unos 87,000 efectivos.

La Procuraduría capitalina había informado el lunes que eran tres los policías detenidos, aunque Rodríguez reveló que un cuarto fue entregado. No dio su nombre.

Control de confianza

Rodríguez dijo que todos los integrantes de la policía de la ciudad han sido sometidos a exámenes de control de confianza, incluidos los cuatro detenidos que tenían entre cuatro y 11 años de pertenecer a la fuerza.

El funcionario evitó mencionar si los cuatro habían pasado los exámenes de confianza bajo el argumento de que es información confidencial.

Admitió que el caso afecta la imagen de la policía, que en los últimos años ha sido considerada una de las mejores en todo el país, pero dijo que no refleja lo que sucede en toda la corporación.

"En todas las policías del mundo existen policías que se apegan a la ley, a la honestidad y al deber de cumplir con los ciudadanos", dijo. "Pero también en todas las policías del mundo hay policías que se alejan de la legalidad, que son deshonestos y que consecuentemente tienen que enfrentar las consecuencias jurídicas de sus actos", añadió.

El llamado "Caso Heaven", por el nombre que tenía el bar del que fueron plagiados los jóvenes, ha causado gran impacto en el país porque el múltiple secuestro se realizó el 26 de mayo a plena luz del día en una concurrida zona turística de la capital.

La Procuraduría local ha señalado que el secuestro y asesinato habría sido en venganza por el homicidio de un distribuidor de drogas, como parte de un pleito entre pandillas rivales.