Agencias
MÉXICO, D.F.- El exombudsman nacional José Luis Soberanes Fernández afirmó que los desaparecidos en México son una deuda pendiente del Estado y, para saldarla, se requiere una política en materia de derechos humanos.

Dijo que al concluir la administración del presidente Felipe Calderón, los derechos humanos quedaron “muy deteriorados” y “mal parados” por el tema de la seguridad pública y el combate al crimen organizado, dio a conocer Milenio.

Además, dijo, en la actualidad vuelven a surgir cuestiones de derechos humanos, independientemente del crimen organizado están los casos de Pasta de Conchos, la protección a las víctimas y la reaparición del Ejército Zapatista de Liberación Nacional, que se pensaban superados y ahora surgen de nuevo. “Son cuestiones que deben tener una solución o van a complicar aún más el tema de los derechos humanos”.

En estos momentos “no lo vemos así, pero en poco tiempo el tema derechos humanos va a estar bastante movidito”, puntualizó.

De la política de derechos humanos de Enrique Peña Nieto, Soberanes Fernández señaló: “Ha habido declaraciones aisladas del Presidente de que vamos a atender los derechos humanos, pero considero que se deben concretar ya en una política, porque si no solamente son declaraciones bonitas, tiene que haber una política pública para saber en que va a consistir, y esperaría que sea pronto que se establezca”

También, señaló, se debe establecer un programa para que los militares salgan de las calles, “porque no será de la noche a la mañana, sin embargo pareciera ser que la solución será la gendarmería que se creará, entonces vamos a ver a los militares convertidos en gendarmes”.

Por eso convocó a las autoridades a definir su programa y quitar la “zozobra en la que se vive porque todos los días tenemos delitos del crimen organizado, por eso es urgente hacer algo de fondo”.

Soberanes sostuvo que el Programa Social de Atención a las Víctimas de Delitos (Províctima), creado en el sexenio de Calderón, solo fue una respuesta mediática. Porque ya estaban las instancias para atender a las víctimas, tanto en la Procuraduría General de la República, como en la Secretaría de Seguridad Pública y en la Comisión de los Derechos Humanos.

Al opinar de la ley de víctimas, el jurista indicó: “Aún hay muchas cosas que están sobre la palestra para discutir y hay que ver como lo procesa el Senado. No nos vaya a pasar como en otras cosas una ley que es bonita y ahí queda, no se concreta, como la famosa reforma de derechos humanos que da una serie de instrucciones y luego no se aterrizan”.